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Conflicto armado entre Israel y Palestina: las claves para entender la escalada de los ataques

El American, pugna, Israel y palestina, Jefe de la UNRWA

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Jerusalén, la capital del Estado de Israel, lleva semanas sumida en una violencia terrible entre palestinos, israelís y las fuerzas del orden. La situación interna, complejísima, por discusiones religiosas y el contexto histórico, está siendo aprovechada por la Autoridad Nacional Palestina y Hamás, que utilizan la coyuntura para lograr una escalada del conflicto armado contra su acérrimo enemigo, el Estado de Israel.

El punto inicial del nuevo capítulo del conflicto armado entre Israel y Palestina se dio a partir de un reclamo de propiedades en un conflicto judicial de larga data por parte de judíos contra 4 familias palestinas en el distrito de Shaikh Jarrah de Jerusalén justo en el mes del Ramadán, mes sagrado para los musulmanes.

La polémica por el desalojo, mucho más compleja de lo que se sabe

Pese a que muchos medios de comunicación instauraron la idea de que la batalla legal en Shaikh Jarrah es un atropello de colonos judíos contra las familias palestinas, en realidad es mucho más complejo que eso. Shaikhn Jarrah es un barrio árabe de muchísima historia establecido en 1865, pero también es muy imporante el judaísmo, pues dentro de esta barrio había una pequeña zona llamada “Shimon HaTzadik”, en honor a Simón el Justo, que antes de 1949 tenía más de 2000 años de asentamiento.

En Shimon HaTzadik se encuentra la tumba de Simón el Justo, gran figura entre el judaísmo, en esta zona muchas familias judías se establecieron hasta que entre 1936 y 1938, y después en 1948, el Imperio Británico ayudó a los árabes a desplazar a los judíos que habitaban el lugar. Un año más tarde, el barrio fue limpiado luego de que TransJordania (ahora Jordania) invadiera Israel.

Dos decadas más tarde, Israel recuperó Jurasalén luego de triunfar en la Guerra de Los Seis Días, después de eso el Estado israelí aprobó una ley que permite a los judíos recuperar las casas de sus antepasados desplazados si logran presentar títulos de propiedad auténticos y si los actuales residentes no tienen un título de compra o de transferencia válida.

El desalojo de las familias parece inminente, pues ha sido una batalla judicial gigante que llegó, incluso, hasta la Corte Suprema de Israel, institución que tenía previsto para este 10 de mayo realizar una audiencia sobre este caso, pero los disturbios provocaron la cancelación de la sesión.

El caso generó ira e indignación entre palestinos y también desembocó en un movimiento mediático importante; incluso se creó una etiqueta llamada #SaveSheikhJarrah que se hizo viral. Desafortunadamente, las tensiones fueron in crescendo y en los últimos días —sobre todo el viernes 7, el sábado 8 de mayo y el lunes 10— los enfrentamientos entre las fuerzas del orden y los palestinos dejaron un saldo de más de 300 heridos, la mayoría palestinos, pero también un par de decenas de policías que tuvieron que enfrentarse a turbas violentas.

Los palestinos arrojan piedras, botellas y bombas caseras durante el fin de semana, mientras que los policías reprimen con gas lacrimógeno y balas de goma. También se impidió, según la policía, unos disturbios violentos este lunes tras ingresar a una mezquita en Jerusalén.

Conflicto armado entre Israel y Palestina
El conflicto armado entre Israel y Palestina, que puede seguir escalando, es en parte por la violencia en las calles; pero detrás de ello, hay también interesas de la Autoridad Palestina y Hamas. (EFE)

Una nueva etapa del conflicto armado entre Israel y Palestina

De acuerdo con la BBC, «Los choques entre palestinos y fuerzas de seguridad israelíes desarrollados durante el fin de semana se agravaron este lunes alrededor de la mezquita de Al Aqsa. La mezquita se sitúa en una explanada conocida para los musulmanes como Haram al Sharif, o el Noble Santuario, y por los judíos como el Monte del Templo».

El contexto histórico agrava una situación delicada, pues cada 10 de mayo los israelíes celebran el Día de Jerusalén, fiesta tradicional que conmemora la reunificación de la ciudad tras el histórico triunfo en La Guerra de los Seis Días.

Antes de la clásica «Marcha de la Bandera», la policía de Israel informó que miles de palestinos se atrincheraron en la mezquita de Al Aqsa durante la noche con piedras y cócteles molotov; eso devino en un irremediable enfrentamiento entre los palestinos y las fuerzas del orden.

Jerusalén es la ciudad santa más importante para las comunidades judías y cristianas, además, es la tercera más importante para los musulmanes, debido a los sagrados templos religiosos separados por escasas calles. En esta ciudad están la Cúpula de la Roca y la mezquita de Al Aqsa, de importancia fundamental para los musulmanes; el Monte del Templo y el Muro de las Lamentaciones, sagrados para los judíos y los Santos Lugares, considerados como sagrados por los cristianos.

Video de la BBC explicando brevemente un problema histórico complejo.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, felicitó el actuar de la policía en defensa de la histórica fecha israelí al entrar a la mezquita de Al Aqsa donde supuestamente estaban atrincherados los palestinos. Mientras tanto, Mahmud Abbas, presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), dijo mediante su portavoz que «El brutal asalto de las fuerzas de ocupación israelíes a los fieles en la sagrada mezquita Al Aqsa y su explanada es un nuevo desafío para la comunidad internacional».

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El conflicto armado entre Israel y Palestina ha dejado una decena de víctimas en represalias israelís. (EFE)

Hamás ataca, Israel reacciona

En medio de las tensiones religiosas, Hamás lanzó cohetes desde Gaza. El 24 de abril, la Defensa Aérea de Israel interceptó un total de 36 cohetes. El ejército israelí respondió con un ataque al norte de dicha región.

Hamás siguió buscando una escalada del conflicto realizando ataques aéreos contra Israel, quien respondió reduciendo la zona de pesca de la franja de Gaza a 9,000 millas, intentando disuadir a Palestina para que cese los ataques. No funcionó. Los continuos ataques desde Gaza continuaron, así que Israel decidió cerrar completamente la franja de pesca el 25 de abril.

Si bien siguieron los enfrentamientos en Jerusalén, Israel levantó el cierre de la franja 5 días después con la condición de que no hubiera más ataques por parte de Hamás o la Autoridad Nacional Palestina.

No hubo más represalias entre las partes hasta el 7 y 8 de mayo, cuando volvió la violencia a Jerusalén. El lunes 10, en medio del Día de Jerusalén, todo empeoró cuando la policía desactivó una atrincherada palestina dentro de la histórica mezquita de Al Aqsa.

La situación fue aprovechada por Hamás, considerado grupo terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea y apoyado por la teocracia iraní, quien lanzó 3 cohetes contra Israel que fueron interceptados por la Cúpula de Hierro, el sofisticado sistema de defensa del Estado israelí.

Incluso, Fathi Hammad, el líder político de Hamás, llamó a los palestinos a decapitar judíos. Todo esto luego de volver a atacar a Israel con 3 cohetes más.

A raíz de la escalada del conflicto entre civiles palestinos y la policía israelí, también crecieron los detenidos, en su mayoría palestinos. Así que Hamás pidió la liberación de los capturados por las autoridades dándole un ultimátum a Israel: si no los liberaban, responderían con cohetes contra Jerusalén.

¿Por qué Hamas y la Autoridad Nacional Palestina buscan una escalada del conflicto armado?

Todo empeoró cuando el grupo terrorista Hamás atacó Jerusalén con al menos 10 cohetes. Por primera vez en tres décadas, la Marcha de las Banderas, en el histórico Día de Jerusalén, fue cancelada por el peligro desencadenado por el ataque aéreo.

Los cohetes palestinos no cesaron y la reacción de Israel, en represalia, fue contundente: bombardeo en la franja de Gaza, dejando al menos 9 muertes, varios de ellos niños y también un miembro de Hamás.

Pese a ello, los ataques aéreos contra Jerusalén llegaron a 150. Israel cumplió su promesa y atacó bases militares y a varios grupos armados de Hamás. Las autoridades en Gaza dijeron que las represalias israelíes cobraron la vida de al menos 20 personas, de las cuales, 9 eran niños.

Si bien la Autoridad Nacional Palestina y Hamás dicen velar por los derechos de los palestinos en Israel, el interés de Palestina por provocar una escalada del conflicto armado parece ser paliar la difícil situación política en su territorio.

En enero pasado, el presidente de Palestina, Mahmud Abbas, hizo un llamado a elecciones tras 15 años sin llevarse adelante un proceso democrático en el Estado palestino. Este anuncio llega para intentar aliviar las divisiones internas en este país.

Sin embargo, anteriormente hubo acuerdos similares que nunca se cumplieron. De hecho, las propias elecciones anunciadas en enero están en peligro, pues el presidente palestino anunció en abril la suspensión de los comicios hasta que Jerusalén acepte albergarlas. Según la constitución de Palestina, las elecciones se deberían de celebrar cada 4 años.

La Autoridad Nacional Palestina y Hamás estuvieron buscando una escalada del conflicto armado entre Israel y Palestina durante semanas, hasta que llegó la respuesta de Israel en medio de tensiones importantes en Jerusalén. (EFE).

Para el consultor de inteligencia y defensa, Jesús Manuel Pérez Triada, «El lanzamiento de cohetes desde la Franja de Gaza es una forma que tienen los radicales de plantarse como actores relevantes de la política palestina, fracturada territorial y políticamente», todo esto en medio de un llamado a elecciones que no le conviene a la Autoridad Palestina.

Según Pérez Triada, consultado por El American, las próximas elecciones son un reto para el liderazgo de la Autoridad Nacional Palestina; puesto que su popularidad es baja, y esta escalada del conflicto armado con Israel «es un regalo del cielo», pues es «una crisis que aleja la atención en el tema de las elecciones».

Eduardo Zalovich Mokobocki, licendiado en historia con residencia en Israel, también conversó con El American y comentó que la violencia en este conflicto proviene, sobre todo, desde las autoridades palestinas que tienen un contexto político complejo:

«La violencia es incitada directamente por las autoridades palestinas que gobiernan las zonas autónomas de Cisjordania, el régimen de Abu Mazen. Simultáneamente el grupo Hamás, que gobierna Gaza, hace la misma propaganda en sus medios. La excusa es vieja: “la mezquita de Al Aksa está en peligro”», dijo Zalovich. «Esta afirmación es ridícula, a nadie se le ocurre tocar la mezquita. La incitación tiene mucho que ver con la rivalidad entre Hamás y Al Fataj, y con la nueva suspensión de las elecciones por parte de Abu Mazen (no votan hace 15 años)».

Por otra parte, Gaza aprovecha también un momento institucional complejo para Israel porque, además de la ola de violencia, Israel también tiene un grave problema para formar gobierno.

El primer ministro Netanyahu no pudo lograr la conformación de un nuevo Gobierno en el plazo de 28 días. Por ende, el presidente de Israel, Reuven Rivlin, llamó al líder de la oposición, Yair Lapid, a que negocie con los demás sectores de la oposición para formar Gobierno, una tarea complicadísima, pues tiene que lograr un convenio entre partes que son diametralmente opuestas, como partidos musulmanes y judíos ortodoxos, por ejemplo.

Si Lapid falla en su misión de formar Gobierno, Israel tendría que volver por quinta vez a las urnas en tan solo 2 años. Eso, mientras fundamentalistas amenazan con una escalada del conflicto armado.

Emmanuel Alejandro Rondón is a journalist at El American specializing in the areas of American politics and media analysis // Emmanuel Alejandro Rondón es periodista de El American especializado en las áreas de política americana y análisis de medios de comunicación.

Contacto: [email protected]

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