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Estados Unidos sigue atravesando su peor crisis fronteriza en décadas. La política de fronteras abiertas aplicada por la administración Biden-Harris durante sus primeras semanas de mandato, las inmediatas eliminaciones de las políticas migratorias de la administración Trump y la retórica pro inmigración promovida por la dupla demócrata durante su campaña fueron algunos de los factores que provocaron la oleada en la frontera con México.
Ante esta situación, Estados Unidos optó por liberar a 50,000 migrantes condicionados a presentarse ante el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), sin embargo, muy pocos de los liberados asistieron a la reunión obligatoria según un reporte de Axios.
De estos 50,000 migrantes liberados, solo el 13 % se presentó a las oficinas del ICE. Según el medio esto es relevante porque «Las cifras considerables son una señal de lo abrumados que siguen estando algunos sectores de la frontera entre Estados Unidos y México». Además, «un solo tramo que cubre el Valle del Río Grande tuvo 20,000 aprehensiones en una semana. Las cifras también muestran las deficiencias de las recientes decisiones de emergencia para liberar a los migrantes».
De acuerdo con el sitio web de noticias, «No tiene precedentes que los agentes liberen a los migrantes sin una notificación oficial para que comparezcan ante el tribunal». Axios informó que los inmigrantes liberados recibieron «una lista de direcciones y contactos de las oficinas del ICE en todo el país y se les ha dicho que se presenten en una de ellas». A dichos migrantes se les prometió conseguir permisos de trabajos de presentarse a las oficinas cuando lleguen a sus destinos.
El 13 % de los 50,000 migrantes corresponde a solo 6,700 migrantes «que cruzaron entre mediados de marzo y mediados de julio se presentaron en las oficinas del ICE hasta el lunes», según comentó «una fuente informada sobre los datos del Departamento de Seguridad Nacional».
Lo más preocupante es que, de esos 50,000, un total de 16,000 migrantes ya superaron los 60 días hábiles que se les dio para presentarse a las oficinas. «Eso supone 2,4 personas que no se han presentado por cada una que se ha registrado», dice el reporte. «Otros 27,000 migrantes que cruzaron y fueron liberados durante el mismo periodo de tiempo aún no se han presentado, pero siguen dentro del plazo de 60 días para informar. Un funcionario del DHS destacó que casi el 70 % de los migrantes están dentro del plazo de 60 días o se han presentado ante el ICE».
Siguen liberando migrantes dentro de Estados Unidos
El representante Henry Cuellar (D-TX) informó que hasta el pasado lunes 26 de julio, unos 7,300 migrantes en el sector del Valle del Río Grande fueron «liberados durante la semana pasada sin fechas de corte». El número total de inmigrantes liberados desde marzo pasado es de 55,000, según Cuellar.
Este número de migrantes liberados sin fechas de juicio puede ir in crescendo porque el flujo de migrantes no se está deteniendo. De hecho, según el agente jefe de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos perteneciente al Sector del Valle del Río Grande, Brian Hastings, solo la semana pasada se detuvieron unos 20,000 migrantes ilegales en este valle.
Unos 189,000 indocumentados fueron detenidos durante el mes de junio en la frontera sur de Estados Unidos, esto representó un incremento del 4,5 % sobre las cifras de mayo, que ya estableció un récord histórico de más de dos décadas.
Las críticas a la administración Biden-Harris por la crisis fronteriza tampoco cesan, sobre todo por parte de los republicanos. El senador Rob Portman (R-OH), el congresista con mayor jerarquía en el Comité de Seguridad Nacional del Senado, denunció ante el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, que la migración ilegal viene aumentando cada mes desde la inauguración del gobierno del presidente Joe Biden el 20 de enero.
«El presidente Biden nos dijo a todos en marzo que las elevadas cifras en la frontera eran estacionales y que debíamos esperar que disminuyeran al acercarse el verano», dijo Portman. «Pero ahora que estamos en los calurosos y peligrosos meses de verano, los encuentros en la frontera no han disminuido. De hecho, siguen aumentando».
La administración Biden-Harris está teniendo múltiples problemas para lidiar con la crisis fronteriza. El enfoque de la vicepresidente Kamala Harris de ayudar a resolver los problemas estructurales en Centroamérica puede ser una solución a largo plazo, no obstante, ese plan no mide la crisis de países sudamericanos que cada vez más exportan migrantes por sus crisis económicas e inestabilidades políticas y sociales. Además, se necesitan acciones urgentes para contrarrestar el gran flujo migratorio.
Asimismo, la excusa de fenómeno estacionario promovida por la administración cada vez pierde más fuerza ante el aumento paulatino de la migración hacia Estados Unidos, incluso en verano. Además, la administración demócrata ha intentado cambiar su enfoque para enfrentar la crisis migratoria sobre la marcha, cambiando la retórica pro inmigración y reestableciendo las políticas impulsadas y aplicadas por Trump.
Emmanuel Alejandro Rondón is a journalist at El American specializing in the areas of American politics and media analysis // Emmanuel Alejandro Rondón es periodista de El American especializado en las áreas de política americana y análisis de medios de comunicación.
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