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Esta semana se hizo pública una resolución en la que 4 alcaldes demócratas estamparon su firma en apoyo a la implementación de la Teoría Crítica de la Raza (TCR) en la educación pública primaria y secundaria. Sin embargo, una de las autoridades se apartó y las firmas fueron eliminadas de la publicación.
La resolución, emanada del encuentro anual de la Conferencia de Alcaldes de Estados Unidos, se publicó inicialmente con los nombres de los demócratas Greg Fischer, alcalde de Louisville, Kentucky; Lori Lightfoot, alcaldesa de Chicago, Illinois; Ted Wheeler, alcalde de Portland, Oregon; y Lauren McLean, alcaldesa de Boise, Idaho.
La información se hizo viral en redes sociales luego de que el escritor y crítico de la TCR, Christopher Rufo, hiciera públicas dos capturas de pantalla y señalara el apoyo de las cuatro autoridades locales en un tuit.
La mañana de este jueves, sin embargo, las firmas de los cuatro alcaldes demócratas desaparecieron del documento, aunque la resolución sigue siendo pública. Además, según el medio local Boise Dev, la firma de la alcaldesa McLean se trató de un “error” del personal.
“Creo que es realmente importante dejar en claro que, de hecho, no di mi nombre ni patrociné esta resolución en la conferencia de alcaldes”, dijo McLean al editor de Boise Dev, y agregó que su firma “no habría tenido sentido” en ese documento. “Fue un error del personal, y sabemos que ocurren errores. Y desearíamos que este no hubiese sucedido”.
El contenido promovido por los 3 alcaldes demócratas
La resolución, que sí recibió el apoyo de los alcaldes de Louisville, Chicago y Portland, afirma que “la raza no es biológicamente real” sino que se trata de una “construcción social” que no tiene conexión alguna con la “realidad biológica”.
El documento pretende reconocer el racismo como una “característica normal de la sociedad” que está incrustado en las instituciones y en el sistema legal, dando por hecho que todas las instancias de incidentes racistas son “manifestaciones de racismo estructural y sistémico”.
Asimismo, el texto responsabiliza a las instituciones por “perpetuar un sistema de castas raciales que relega a las personas de color a los niveles inferiores”.
Tomando en cuenta esas y otras afirmaciones sobre el racismo, típicas de la doctrina de TCR, el documento resuelve que “los alcaldes apoyan la implementación de la TCR en el currículum de educación pública“.
La resolución concluye que “la Conferencia de Alcaldes de los Estados Unidos apoya el acceso a programas equitativos que reflejan la historia, reducen las brechas de rendimiento y garantizan que los estudiantes de BIPOC (Negros, Indígenas y Personas de Color) reciban recursos para asegurar su éxito al completar su educación primaria”.
