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Los hispanos republicanos no son víctimas de la “desinformación”, solo tienen sentido común

Hispanos republicanos, El American

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Si desea saber cómo el presidente Biden piensa usar su nueva “Junta de Gobierno de Desinformación”, solo fíjense lo que está sucediendo aquí en el Sur de la Florida. Los activistas liberales están exigiendo que el gobierno de EE.UU. tenga en la mira a los medios en español para “proteger” a los votantes hispanos. Esto es insultante y plantea serias dudas sobre el futuro de la libertad de expresión en nuestro país. Y, sin duda, muestra lo que realmente piensa la izquierda.

En este momento está ocurriendo un cambio importante en nuestro país. Entre el 2016 y 2020, el apoyo de los hispanos a Donald Trump aumentó en ocho puntos. Ahora, los hispanos están divididos equitativamente en su apoyo a los demócratas y republicanos. En algunas partes del Sur de la Florida, los republicanos en realidad tienen una ventaja.

La fuerza impulsora detrás de este cambio es obvia: los liberales de izquierda están adoptando las mismas ideas y tácticas radicales que empujaron a muchos hispanos a huir de sus países natales. El Partido Demócrata ya no es el partido de los impuestos progresivos y la ayuda social. Los demócratas de hoy en día exigen que la gente hable, actúe y crea las mismas tonterías que ellos sobre los colegios, la inmigración, la identidad de género y más. Esto preocupa a la mayoría de los estadounidenses, pero aún más a aquellos que huyeron de regímenes marxistas que tienen similitudes a la izquierda moderna.

Sin embargo, los activistas liberales se niegan a aceptar la explicación obvia de los hechos, ni aceptan el testimonio real de republicanos hispanos. En cambio, afirman que los electores son víctimas de la “desinformación”. Es una lección retorcida sobre cómo la política de identidad permite el racismo. Para los ideólogos woke, las personas son poco más que la suma de su color de piel y etnia. No pueden imaginar que los inmigrantes, especialmente los inmigrantes hispanos, no apoyan a sus defensores de la izquierda radical. Su “deslealtad” debe indicar juego sucio.

La verdad es que los hispanos en este país no están pensando cada segundo de sus vidas sobre su país de origen. Están más preocupados por la calidad de vida de sus familias; sus responsabilidades como esposos o esposas, padres de familia, vecinos, profesores; su rol en la comunidad y como empresarios dueños de pequeñas empresas. Las políticas de los demócratas radicales están dificultando que todos los trabajadores americanos mejoren su calidad de vida y cumplan con esas responsabilidades. Es por eso que más hispanos están votando por los republicanos. Acusarlos de ser manipulados por medios de comunicación es vergonzosamente degradante.

Sin embargo, hay más motivos para estar preocupados. Temerosos del giro hacia la derecha por parte de los hispanos, los activistas liberales de izquierda están pidiéndole al gobierno federal que tome medidas contra los programas de radio conservadores en mi estado natal. Las regulaciones actuales prohíben la violación de la libertad de expresión, excepto en casos en que la información esté causando un “daño público sustancial” o un daño privado inmediato. Los activistas dicen que “no es suficiente” y exigen que la Administración Biden sea más dura.

Mientras tanto, el presidente Biden acaba de nombrar a alguien que “se estremece ante la idea de… absolutistas de la libertad de expresión” para liderar su nueva “Junta de Gobernanza de la Desinformación”. La posibilidad de que la Administración Biden empiece a prestar atención a los llamados a censurar los medios conservadores, bajo el Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU., lamentablemente es muy real y una amenaza para nuestra libertad de expresión.

Esta es la realidad del país en el que vivimos ahora. Los fracasos políticos de los demócratas están empujando aún más votantes hispanos al redil republicano, pero en lugar de reformar su propia agenda política, los liberales de izquierda quieren que el Gobierno tome medidas enérgicas contra las voces que no están de acuerdo. Todos los ciudadanos de EE.UU., independientemente de su país de origen, deben mantenerse firmes en contra de este impulso de censura política y recordarles a los ideólogos de la extrema izquierda que somos más que el color de nuestra piel y que un apellido que termina en vocal.

Marco Rubio serves as a Republican senator from Florida / Marco Rubio es senador republicano por Florida

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