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Casi ningún conservador de verdad había puesto muchas esperanzas en un gabinete de Liz Truss en el Reino Unido. Pero nadie podía imaginar el gigantesco descalabro que sería su Gobierno.
De hecho, es el más corto para un PM en la historia del Reino Unido. Incluso si tenemos en cuenta a los reyes ingleses desde Alfredo el Grande como jefes de gobierno, el Gobierno de Truss es el tercero más corto (el cuarto si tenemos en cuenta el reinado de nueve días de Lady Jane Grey en el siglo XVI) de la historia, y el más corto en medio siglo.
Los conservadores no querían mucho a Truss, no por su falta de talento político, sino por sus opiniones. Un personaje camaleónico, Truss ha pasado de liberal demócrata a tory, de Remainer a Brexiteer, de backbencher a primera ministra, y de nuevo a backbencher. No se la consideraba una conservadora fiable, lo que alejó a muchos de la derecha del partido.
Sin embargo, nadie podía prever su falta de habilidad política.
En un momento en el que los tories ya eran impopulares y todo el mundo esperaba que llevara a cabo los negocios como siempre y uniera al partido, intentó jugar al juego de la Dama de Hierro, sin el control sobre el partido ni el carisma de Thatcher, y perdió… rotundamente.
Truss propuso gigantescos recortes presupuestarios y fiscales que hicieron saltar las alarmas en el mercado y la llevaron a ser aún más impopular que el príncipe Andrés, buen amigo del difunto Jeffrey Epstein. También propuso aumentar la migración, lo que confirmó las sospechas de los tories más conservadores.
Truss sufrió un problema político demasiado común en la actualidad: no entendió su papel, que los tories sobrevivieran hasta la siguiente elección general. Se suponía que debía mantener caliente el asiento 10 de Downing Street durante un par de años. Tal vez, si hubiera hecho eso, habría sido lo suficientemente popular como para convertir sus opiniones en políticas reales. Pero no. Al parecer, creyó tener el mandato de Thatcher con el carisma de Churchill. Ahora será poco más que un dato trivial de la historia británica.
Viva Liz la Breve (¿?).
Edgar is political scientist and philosopher. He defends the Catholic intellectual tradition. Edgar writes about religion, ideology, culture, US politics, abortion, and the Supreme Court. Twitter: @edgarjbb_ // Edgar es politólogo y filósofo. Defiende la tradición intelectual católica. Edgar escribe sobre religión, ideología, cultura, política doméstica, aborto y la Corte Suprema. Twitter: @edgarjbb_