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El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó la semana pasada un proyecto de ley que despoja a Disney de su estatus especial y el autogobierno del que goza en el centro de Florida. El plan de DeSantis entrará en vigor en junio del próximo año y cambiará fundamentalmente los privilegios y beneficios que Disney ha recibido en el Estado del Sol desde la década de 1960.
El distrito de Reedy Creek se creó en 1967 y permitió a Walt Disney y a su empresa supervisar el uso del suelo, incluidas las protecciones medioambientales de la zona, y proporcionar servicios públicos (bomberos, seguridad, etc.) dentro de los 25.000 acres que abarca el distrito. El estatus permite a Disney actuar como su propio gobierno local, incluida la autoridad para gravar sus propios impuestos.
La ley que elimina el distrito llegó después de semanas de tensiones entre el gobernador y la corporación, que entró en la discusión política al convertir en objetivo de la empresa el derrotar el proyecto de ley de Derechos de los Padres en la Educación, llamado infundadamente por los críticos Don’t Say Gay, aprobado por la legislatura de Florida a principios de este año. El Gobernador condenó la decisión de Disney, afirmando que la empresa había cruzado una “línea roja” y anunció que estaba estudiando la posibilidad de revisar los privilegios especiales de los que goza la empresa en el estado.
La ley que deroga el estatus especial de Disney ha sido criticada, como era de esperar, por el Partido Demócrata de Florida, que ha argumentado que la legislación es una maniobra del gobernador para aumentar su propio poder, y que la decisión perjudicará la economía del estado. DeSantis ha defendido sus decisiones, argumentando que el estatus especial de Disney “era realmente una aberración” y que “ningún individuo o ninguna empresa en Florida es tratada de esta manera”.
¿Qué dicen los críticos?
Los críticos del proyecto de ley han argumentado que perjudicará más a los contribuyentes que a Disney. El recaudador de impuestos demócrata del condado de Orange, Scott Randolph, ha dicho que los ciudadanos de su condado tendrán que asumir los millones de dólares de los pagos de la deuda y los gastos operativos de Disney, pero el condado no tendrá la capacidad de recaudar impuestos para pagarlos, pues alega que la autoridad fiscal dejará de existir.
Randolph también ha argumentado que los habitantes del condado pueden enfrentarse a una subida de hasta el 25% como forma de pagar los posibles gastos adicionales. La evaluación del Senado sobre el impacto financiero del proyecto de ley no ofrece un panorama claro de los efectos. Afirman que “tendrá un impacto fiscal indeterminado en los residentes y negocios actualmente atendidos por un distrito especial disuelto por el proyecto de ley. Dichos residentes y negocios pueden experimentar un cambio en los servicios prestados anteriormente por el distrito especial y en las evaluaciones e impuestos relacionados”.
Randolph también criticó la forma en que se aprobó el proyecto de ley, diciendo que la legislación se apresuró en solo 48 horas y que los legisladores estatales no tuvieron tiempo suficiente para elaborar los detalles de la ley.
La oficina de DeSantis defiende la eliminación del estatus especial de Disney
En declaraciones a El American, Christina Pushaw, secretaria de prensa del gobernador DeSantis, respondió a las críticas sobre un posible aumento de impuestos a los ciudadanos que viven cerca del mundo de Disney diciendo que “Disney será responsable de pagar los impuestos justos” y señaló que el gobernador ha prometido públicamente que su gobierno “se va a encargar de todo eso”. “No se preocupen. Lo tenemos todo pensado (…) van a pagar más impuestos como resultado de esto”.
Los redactores del proyecto de ley también han seguido la promesa de DeSantis diciendo en el comunicado de prensa que “no es el entendimiento o la expectativa para el SB 4-C, la abolición de los distritos especiales independientes, para causar cualquier aumento de impuestos para los residentes de cualquier área de la Florida. En un futuro próximo, propondremos una legislación adicional para autorizar distritos especiales adicionales de una manera que garantice la transparencia y la igualdad de condiciones bajo la ley”.
Pushaw también contrarrestó los puntos expuestos por el recaudador de impuestos del Condado de Orange diciendo que él y otros demócratas están “haciendo declaraciones que no resisten el pensamiento crítico o la lógica básica”. Pensemos en esto por un minuto: si es cierto que la derogación del distrito especial otorgaría a Disney una rebaja de impuestos, y los contribuyentes locales estarían en el gancho de este rescate para beneficiar a la empresa… ¿Por qué se opondría Disney a la idea de derogar su distrito especial? De hecho, si eso fuera cierto, ¿por qué no habría presionado para deshacerse del distrito especial hace tiempo?”.
Pushaw también dijo que el gobernador tiene un plan para evitar una potencial reducción de impuestos para Disney, pero que se hará público en las próximas semanas. Hizo hincapié en que DeSantis “no apoyaría una política sin pensar cuidadosamente en todos los posibles efectos”.
Aunque no hay un plan político claro de cómo funcionará el nuevo acuerdo, la ley no entrará en vigor hasta junio del próximo año, lo que significa que hay que esperar mucho tiempo para ver cuándo y si el gobernador cumple su promesa.
El plan Disney de DeSantis está aquí para quedarse
La ley tiene una disposición que permite que cualquier distrito especial que se elimine sea restablecido a partir del 1 de junio de 2023, lo que potencialmente permite al gobernador restaurar el estatus especial de Disney en el futuro.
Sin embargo, Pushaw dejó claro que no hay ningún escenario en el que DeSantis considere eso, añadiendo que “el gobernador DeSantis siempre ha estado en contra de la idea del bienestar corporativo y de los recortes preferenciales en la ley para beneficiar a corporaciones específicas. El amiguismo no es conservador. Florida es un estado favorable a los negocios, y eso significa promulgar políticas que promuevan la competencia del libre mercado. Permitir que una gran corporación tenga privilegios extraordinarios bajo la ley, que sus competidores no tienen, es antitético a la idea de un mercado libre”.
Aunque la situación fiscal final de Disney World y los condados circundantes está aún por determinarse, incluyendo las formas específicas en que DeSantis se asegurará de que la empresa siga pagando impuestos, una cosa parece estar clara: Disney no disfrutará de su estatus especial mientras DeSantis esté en el cargo.
Edgar is political scientist and philosopher. He defends the Catholic intellectual tradition. Edgar writes about religion, ideology, culture, US politics, abortion, and the Supreme Court. Twitter: @edgarjbb_ // Edgar es politólogo y filósofo. Defiende la tradición intelectual católica. Edgar escribe sobre religión, ideología, cultura, política doméstica, aborto y la Corte Suprema. Twitter: @edgarjbb_
Daniel is a Political Science and Economics student from the University of South Florida. He worked as a congressional intern to Rep. Gus Bilirakis (FL-12) from January to May 2020. He also is the head of international analysis at Politiks // Daniel es un estudiante de Cs Políticas y Economía en la Universidad del Sur de la Florida. Trabajo como pasante legislativo para el Representate Gus Bilirakis (FL-12) desde enero hasta mayo del 2020. Daniel también es el jefe de análisis internacional de Politiks.