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Activista norcoreano liderará iniciativa para contrabandear memorias USB a su país

Corea del Norte, El American

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La organización Human Rights Foundation (HRF) designó al activista y sobreviviente al régimen norcoreano Seongmin Lee como líder de su iniciativa por la libertad de información en Corea del Norte, Flash Drives for Freedom (FDFF), que consiste en introducir secretamente a este país asiático memorias USB cargadas con información sobre el mundo exterior y distribuirlos entre su población.

Nacido y criado en la sociedad secreta de Corea del Norte, y como muchos otros de sus compatriotas, Seongmin Lee participó en una red comercial clandestina en la frontera con China, en la que fue testigo de primera mano de lo indispensable que es la información externa para la oprimida población norcoreana.

La sociedad secreta del socialismo en Corea del Norte

Cuando tenía 23 años, Lee pudo escapar a Corea del Sur, desde donde decidió trabajar por contar la cruda realidad que enfrenta Norcorea y dedicarse a la promoción de los derechos humanos en su país. Desde entonces, ha testificado ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y ha sido invitado por el Departamento de Estado de Estados Unidos para intercambiar conocimientos sobre el régimen totalitario de Kim Jong-Un.

El activista estima que el programa FDFF es de suma importancia para combatir la ideología a la que son sometidos los ciudadanos norcoreanos.

“Creo que las memorias USB pueden ser un arma más poderosa para la libertad que la artillería y las bombas; estas últimas solo pueden lastimar a unos pocos, mientras que el primero puede influir en las mentes y los corazones de miles sin ningún tipo de violencia”, dijo Lee a la HRF en una entrevista.

Explicó que el régimen norcoreano retrata a los americanos como malhechores y a Corea del Sur como un país que ha sido “colonizado” por Occidente, y donde los niños pobres pasan la mayor parte del tiempo en vertederos en busca de alimentos en lugar de estudiar en las escuelas. La iniciativa de la HRF, a su juicio, es una herramienta clave en la “liberación” de la ciudadanía norcoreana.

“Creo firmemente que el acceso a la información sin restricciones dentro de Corea del Norte es un paso necesario para liberar a los ciudadanos norcoreanos de las garras del régimen y ayudarlos a convertirse en consumidores más críticos de información en general, así como ayudarlos a tomar el asunto en sus propias manos para su futuro”, apuntó Lee.

Durante años, desertores de Corea del Norte se han organizado para contrabandear información externa a su país en unidades USB, con el objetivo de contrarrestar la propaganda constante de Kim Jong-un. La FDFF es un esfuerzo de la organización por colaborar en esa misión.

Hasta enero de 2022, la HRF había donado más de 110,000 dispositivos USB, ayudando a aportar cerca de 50 millones de horas de información escrita y más de 2.1 millones de horas de video que fueron distribuidos entre más de un millón de norcoreanos al interior del país.

La labor humanitaria de la HRF se extiende por todo el planeta. En América Latina, la organización ha sido indetenible en la denuncia de la corrupción y en la lucha por la justicia, especialmente contra regímenes totalitarios. Una de sus más recientes victorias tuvo que ver con una decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre la censura en Venezuela.

A través de los años, la HRF ha denunciado la represión comunista en Cuba, el pasado represivo de la izquierda en Brasil, la persecución política en Nicaragua y los temores de autoritarismo en El Salvador.

Tomás Lugo, journalist and writer. Born in Venezuela and graduated in Social Communication. Has written for international media outlets. Currently living in Colombia // Tomás Lugo, periodista y articulista. Nacido en Venezuela y graduado en Comunicación Social. Ha escrito para medios internacionales. Actualmente reside en Colombia.

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