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La administración de Joe Biden espera estrechar lazos de cooperación con Canadá en relación a la política exterior sobre el cambio climático. La acción se ve amenazada por China, país que ocupa un lugar predominante en cualquier esfuerzo internacional para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Pekín ha advertido en diversas ocasiones que está dispuesta a cooperar con Estados Unidos y la comunidad internacional “sobre el cambio climático”, siempre que no se socaven sus intereses.
Biden y el primer ministro canadiense Justin Trudeau intentarán trazar este martes una “hoja de ruta” durante su primera reunión bilateral, donde se espera aborden el tema climático, y la creación de un enfoque común en relación a China. Dentro de los planteamientos, medios locales afirman que hablarán de las “prácticas económicas injustas” de China y de su historial de derechos humanos.
Trudeau y la tensa relación con China
Los derechos humanos y su violación por parte del régimen chino ha sido ampliamente criticado por ambas naciones.
El lunes, legisladores canadienses aprobaron una resolución no vinculante que denuncia la represión de los uigures por parte de China como un genocidio. Sin embargo, Trudeau no concuerda con la calificación.
“Cuando se trata de la aplicación de la palabra muy específica genocidio, simplemente debemos asegurarnos de que todas las I estén punteadas y las T estén cruzadas antes de que se tome una determinación como esa”, dijo Trudeau la semana pasada.
Los sobrevivientes y activistas uigures afirman que los campos de detención masiva en Xinjiang, que son defendidos por Beijing como un programa antiterrorista, son campos de “esclavitud moderna” y afirman hay una “violación masiva” de mujeres uigures.
