Read in English
Durante su testimonio ante una juez de Los Angeles el pasado miércoles, Britney Spears por fin pudo revelar algunas de las insólitas situaciones por las que ha tenido que pasar durante años bajo la tutela legal de su padre.
Según la estrella del pop, el equipo legal designado por su padre la ha obligado a utilizar métodos anticonceptivos para impedir su deseo de tener un tercer hijo, la ha forzado a dar conciertos en contra de su voluntad y está limitada de disponer de su propio dinero, entre otras cosas, ejerciendo sobre ella un control abusivo y explotador.
Britney Spears pidió durante la audiencia que se ponga fin a la tutela legal que ejerce su padre, James Parnell Spears, desde 2008 que le otorga un poder casi ilimitado no sólo sobre sus finanzas y su multimillonario patrimonio, sino además sobre casi cualquier aspecto de su vida.
“Ahora mismo tengo un DIU dentro de mí para que no pueda quedar embarazada. Quise sacármelo para poder intentar tener otro bebé, pero este denominado equipo [de la tutela] no permite que vaya al doctor a quitármelo, ya que ellos no quieren que tenga más niños. Así que básicamente, este tutelaje me está haciendo más daño que bien”, se quejó amargamente Britney Spears.
“Estoy cansada de sentirme sola. Merezco tener los mismos derechos que tiene cualquiera de tener un hijo, una familia, cualquiera de esas cosas, y más”.
En su desgarrador testimonio, la cantante llegó a confesar haber “agradecido a Dios de rodillas” la muerte de su psiquiatra en 2019, a quien señaló de ser “100 % abusivo” con ella durante su terapia.
“No está bien que se me obligue por ley a hacer cosas que no quiero”. Britney Spears reclamó que “por ley debería poder demandarlos por amenazarme diciendo que si no iba a estas consultas dos veces a la semana, no podían dejarme usar mi dinero para ir a Maui en mis vacaciones”.
Spears también narró ante la juez que fue forzada por este equipo a actuar en una gira de conciertos por Las Vegas, un trabajo que fue realmente duro. Explicó que siempre se tomó su trabajo muy en serio, y que dirigió durante años su espectáculo en Las Vegas, creando y ensayando coreografías con 16 bailarines.
A pesar de que según ella existen “toneladas de vídeos” de sus ensayos, sus tutores la acusaron de no esforzarse, simplemente por haberse negado a hacer un movimiento de baile de una forma concreta.
Según Spears, ante la negativa a ese paso de baile en concreto, el equipo llamó a su terapeuta acusándola de no cooperar y no estar tomando su medicación, ante lo cual la obligó a empezar a tomar litio.
“El litio es una medicación muy, muy fuerte y completamente diferente a la que estaba acostumbrada. Puedes llegar a tener problemas mentales si tomas demasiado, si lo usas más de cinco meses”, aseguró.
“Señora, no estoy aquí para ser la esclava de nadie. Debería poder decir que no a un movimiento de baile”, afirmó Britney Spears ante la juez.
“Mi médico hizo que vinieran seis enfermeras diferentes a mi casa, para que se quedaran conmigo y controlaran esta nueva medicación, que para empezar nunca quise tomar. Había seis enfermeras diferentes en mi casa y no me dejaron entrar en mi coche para ir a cualquier sitio durante un mes.”
Britney Spears dijo que su familia “no hizo una maldita cosa” con respecto al litio, y que incluso su padre “estaba a favor”, de quien aseguró “le encantaba el control” que tenía sobre ella, “para hacer daño a su propia hija al cien mil por ciento. Le encantaba”.
La estrella del pop también arremetió contra el estado de California durante su testimonio, al que acusó de permitir que su tutela continúe, a pesar de haber documentado el “shock” y el “trauma” que ha sufrido.
“No [sé] cómo el estado de California puede tener todo esto escrito en los documentos judiciales desde que me presenté, y no hacer absolutamente nada, [ellos] acaban de contratar, con mi dinero, a otra persona para mantener a mi padre a bordo”, alegó Spears ante el tribunal.
Spears pidió al tribunal que, además de poner fin a su tutela, le gustaría que se le concediera la posibilidad de dar una entrevista sobre lo ocurrido y poder dar los nombres de las personas que la han hecho sufrir.
“También me gustaría poder compartir mi historia con el mundo, y lo que me hicieron, en lugar de que sea un secreto a voces para beneficiar a todos ellos”, solicitó Spears. “He estado tan enfadada y lloro todos los días, me preocupa que me digan que no puedo exponer a la gente que me hizo esto”.
El movimiento de apoyo a Britney Spears fue acusado de teoría de la conspiración
La aparente injusticia de la tutela legal sobre Britney Spears ha generado todo un movimiento de apoyo a la estrella del pop por parte de sus fans, bajo el hashtag #FreeBritney, al cual se están adhiriendo cada vez más personas, e incluso otros famosos como su exnovio Justin Timberlake Rose McGowan, o el senador Ted Cruz.
El movimiento #FreeBritney surgió hace unos años en internet y fue acusado de ser una teoría de la conspiración. Sin embargo, como ha pasado en otros casos, lo que en un primer momento intentó ser ridiculizado, ha resultado ser real.
Lo cierto es que en 2008 desde que Britney Spears fue hospitalizada bajo el pretexto de su salud mental, su padre y un equipo de abogados vienen ejerciendo una tutela que, si bien es legal, es aparentemente abusiva e ilegítima.
Tras más de una década en la que su padre aparentemente ha estado intentando esconder esta situación acusando de “conspiranoicos” a quienes intentaban ayudar a Britney Spears, gracias al tesón e insistencia de estos fans, Britney por fin ha podido revelar su historia al mundo.
Ignacio Manuel García Medina, Business Management teacher. Artist and lecturer specialized in Popular Culture for various platforms. Presenter of the program "Pop Libertario" for the Juan de Mariana Institute. Lives in the Canary Islands, Spain // Ignacio M. García Medina es profesor de Gestión de Empresas. Es miembro del Instituto Juan de Mariana y conferenciante especializado en Cultura Popular e ideas de la Libertad.
Social Networks: @ignaciomgm