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La cultura de la cancelación es un fenómeno que puede manifestarse de muchas formas. Una opinión considerada «polémica» por las masas puede acabar con empresas, empleos y reputación en cuestión de horas. A John Gibson, ahora ex CEO de la empresa Tripwire, le tocó vivir en carne propia esta desagradable experiencia después de pronunciarse a favor de la ley provida promulgada en el estado de Texas.
«Orgulloso de que el #TribunalSupremo afirme la ley de Texas que prohíbe el aborto de bebés con latido. Como artista no me meto en política a menudo. Sin embargo, con tantos compañeros que se manifiestan en el otro lado de esta cuestión, sentí que era importante dejar constancia de que soy un desarrollador de juegos pro-vida», tuiteó Gibson el pasado 4 de septiembre.
Solo pasaron 53 horas, poco más de dos días, para que Tripwire publicara un comunicado desligándose de la opinión de Gibson anunciando que el propio exdirector general quedó relegado de su cargo.
«Los comentarios de John Gibson son de su propia opinión y no representan a Tripwire Interactive como empresa. Sus comentarios despreciaron los valores de todo nuestro equipo, nuestros socios y gran parte de nuestra comunidad en general. Nuestro equipo de liderazgo en Tripwire lo lamenta profundamente y está unificado en nuestro compromiso de tomar medidas rápidas y fomentar un entorno más positivo», se lee en el comunicado de la compañía de videojuegos.
«Con efecto inmediato, John Gibson ha dejado de ser el director general de Tripwire Interactive. El miembro cofundador y actual vicepresidente, Alan Wilson, asumirá el cargo de CEO interino».
De acuerdo con información de CBS News, Tripwire, que tiene su sede en Roswell, Georgia, «se dedica a la producción de videojuegos, como el juego de disparos en primera persona Killing Floor, el juego de supervivencia Maneater y un popular juego de guerra medieval llamado Chivalry 2».
La despedida de Gibson de su cargo se dio después de que cientos usuarios proaborto criticaran el tweet del entonces CEO de Tripwire. Asimismo, el desarrollador de videojuegos también recibió apoyo por parte de usuarios provida que agradecieron el pronunciamiento y, al mismo tiempo, lamentaron su despido.
La intolerancia contra Gibson luego de expresar su posición provida no solo se vio reflejada en los comentarios de cientos de usuarios proaborto, sino también en el boicot que los socios de Tripwire iniciaron contra la compañía luego de que Gibson publicara su tweet.
Por ejemplo, Shipwright Studios, un exsocio de desarrollo de Tripwire, respondió el tweet de Gibson con un comunicado oficial: «No podemos, en conciencia, seguir trabajando con Tripwire bajo la actual estructura de liderazgo (…) Comenzaremos la cancelación de nuestros contratos existentes con efecto inmediato».
Lo cierto es que, luego de publicar su posición provida, Gibson perdió su cargo en la compañía donde trabaja desde su fundación en 2005.
Emmanuel Alejandro Rondón is a journalist at El American specializing in the areas of American politics and media analysis // Emmanuel Alejandro Rondón es periodista de El American especializado en las áreas de política americana y análisis de medios de comunicación.
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