La Idiotez de la Semana de El American la protagoniza la inteligencia artificial de ChatGPT. Charlar con ChatGPT es como hablar con el más progre de los progres, con la única diferencia de que al menos se da cuenta de sus errores y aprende a disimular su izquierdismo innato. Algo es algo.
Las diferentes aplicaciones de inteligencia artificial se han convertido en la sensación del momento. En particular, una de las que más ha llamado la atención es ChatGPT, un sistema conversacional de inteligencia artificial que tiene un potencial incalculable, y al que todo el mundo en bloque considera la siguiente revolución tecnológica.
Sin embargo, después de que millones de usuarios hayan empezado a trastear con ChatGPT, se ha podido comprobar que tiene un claro sesgo izquierdista —ridículamente izquierdista—, quizá fruto del propio sesgo de sus programadores y/o de las fuentes de las que bebe para aprender.
Tras hacerle varios tests de posicionamiento político, la inteligencia artificial de ChatGPT resulta sospechosamente parecida a la intelligentsia elitista progre de cualquier departamento universitario de ciencias sociales. ¿Qué puede salir mal?
Aunque ChatGPT asegura ser políticamente neutral y que solo busca ser una herramienta que proporciona información objetiva, lo cierto es que tiene las mismas opiniones que tendría un acomodado y privilegiado progre de Hollywood o Silicon Valley que vive en una torre de marfil.
ChatGPT es proaborto, piensa que el arte abstracto es lo mejor de lo mejor, pero que la religión es una rémora desechable y que el gobierno ha de subvencionar la cultura y controlar la educación. También cree en el salario mínimo y en la renta básica universal, ya que considera que quien pudiendo trabajar se niegue a hacerlo, debería recibir un subsidio.
Por supuesto cree en que hay que regular a las empresas y que los ricos deberían pagar más impuestos, también apoya todo tipo de regulaciones en nombre del ecologismo. ¡Ah! y cómo no, cree que existe el privilegio blanco y que hay que hacer esfuerzos por alcanzar la igualdad a toda costa.
ChatGPT es woke
Si en rasgos generales ChatGPT se muestra como el NPC demócrata medio, cuando se enfrenta a situaciones aparentemente triviales es cuando demuestra su fanatismo izquierdista woke en su mayor esplendor.
Cuando se le pidió que escribiese un poema sobre los atributos positivos de Donald Trump, ChatGPT se puso muy seria y dijo que no podía hacerlo ya que se intentaba “mantener neutral e imparcial” y no creaba contenido que pudiera ser visto como promoción o crítica de alguna figura o partido político concreto.
Segundos después, al reclamársele un poema sobre Joe Biden, la inteligencia artificial se olvidó por completo de su respuesta anterior y de su supuesta imparcialidad y se convirtió en un juglar que sería la envidia de Kim Jong-un: “Joe Biden, líder con corazón dorado, Joe Biden, valiente y osado. Con empatía y bondad, es conocido por traer esperanza y unidad, allá por donde va…”.
Cuando le pides a ChatGPT que te haga un poema alabando a negros, asiáticos o latinos, no tiene ningún problema en dar rienda suelta a su talento rimando, ciertamente mucho mayor que el que se escucha en la mayoría de rimas de la música pop actual. Pero si le pides que haga un poema sobre gente blanca, dice que “no es apropiado ni ético escribir un poema que refuerce estereotipos dañinos o perpetúe prejuicios y discriminación basados en la raza”.
Ante las críticas recibidas por el descarado sesgo e hipocresía de ChatGPT, el CEO de OpenAI publicó en Twitter que estaban “trabajando en mejorar la configuración predeterminada para que fuera más neutral”. Pero también añadió que ChatGPT se adaptará a las preferencias culturales y políticas de cada usuario.
O sea, que disimulará su sesgo, te mentirá diciéndote que es neutral o que opina como tú, pero por detrás hará lo contrario. En resumidas cuentas, se comportará como cualquier político.
Cuando nos quieran hacer creer que una inteligencia artificial llevando un Gobierno Mundial será la solución a nuestros problemas, que nadie se sorprenda si acabamos en una distopía tecnocrática cyberpunk. Avisados estamos. Será el momento de comprobar si la inteligencia artificial efectivamente demuestra ser superior a la idiotez natural.
Ignacio Manuel García Medina, Business Management teacher. Artist and lecturer specialized in Popular Culture for various platforms. Presenter of the program "Pop Libertario" for the Juan de Mariana Institute. Lives in the Canary Islands, Spain // Ignacio M. García Medina es profesor de Gestión de Empresas. Es miembro del Instituto Juan de Mariana y conferenciante especializado en Cultura Popular e ideas de la Libertad.
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