Las sanciones del Gobierno de Donald Trump contra el régimen de Nicolás Maduro no son las responsables de la crisis en Venezuela.
Tanto Maduro como algunos líderes venezolanos que se dicen de “oposición” le han solicitado al Gobierno de Estados Unidos que alivie las sanciones contra el régimen tiránico. Sin embargo, la situación en el país suramericano se debe a la cleptocracia que inició con Hugo Chávez en el poder.
Tras las elecciones en Estados Unidos, el usurpador Maduro anunció que reconocía a Joe Biden como el próximo presidente del país. Ante eso, decidió pedirle que «levante todas las sanciones» en su contra.
Supuestos opositores como el excandidato presidencial Henrique Capriles han seguido la narrativa de Maduro de exigir que se levanten las sanciones; No reconocen que la crisis económica, política y social surgió con la llegada de Chávez al poder y al incremento de normas y leyes que cercenaron las libertades.
Este miércoles 9 de diciembre el presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, anunció que buscará la revisión de sanciones contra la tiranía. En una entrevista con la agencia de noticias The Associated Press anunció que se van a «revisar los mecanismos a nivel internacional» para aumentar las presiones contra el régimen; lo que incluirá la evaluación de las sanciones para ver «cómo mejor direccionar, cómo facilitarlas para que sean incluso más rápidas».
Aún se desconoce cuál sería el modo de actuar de un eventual Gobierno de Joe Biden en relación con Venezuela. Algo que con los años ha quedado en evidencia es que las sanciones no son responsables de la crisis que enfrenta el país suramericano.
Durante la campaña electoral, asesores de Joe Biden revelaron que, de ganar, el candidato demócrata, desmontará todas las políticas hacia Latinoamérica emprendidas por el Gobierno de Donald Trump, al punto de estar dispuesto a normalizar las relaciones con el régimen cubano y negociar con la tiranía de Maduro.
Aunque Maduro se mantiene en el poder, el Gobierno Trump logró reducir su margen de maniobra poco a poco para asfixiar sus ingresos. Maduro quiere hacer ver que las sanciones internacionales son las responsables de la crisis, pero la verdad es que ha sido el socialismo el que acabó con más de 10,200 empresas en el país suramericano.
Antes de que existieran las sanciones contra el régimen, el pueblo venezolano ya sufría una crisis humanitaria sin precedentes, pues los ingresos que percibía la tiranía no eran invertidos en la ciudadanía, sino malversados por la cleptocracia.
El desabastecimiento de alimentos y medicamentos surgió a raíz de que Chávez emitiera la Ley Orgánica del Trabajo, la Ley de Costos y Precios Justos y un Control de Cambio que impidió que empresas grandes y pequeñas pudieran producir a cabalidad.
Más de 20 empresas multinacionales salieron de Venezuela debido al socialismo. Las razones que exponen son la profunda escasez de materia prima, la falta de acceso a divisas, las leyes y normativas que han obstaculizado la actividad económica y los precios «absurdamente» controlados, lo que ha generado fuertes pérdidas en sus operaciones.
La Ley Orgánica del Trabajo permitía al Estado intervenir en las decisiones laborales de la empresa privada; la de Costos establecía precios máximos a los productos dejando sin margen de ganancia a las compañías y el Control de Cambió no permitía que los empresarios pudieran invertir o importar para elaborar los bienes de la canasta básica.
Las compañías en el país suramericano no tienen acceso libre a las divisas, por lo que importar materia imprima se hizo misión imposible, al punto que las empresas fueron cerrando sus puertas una a una.
La actual escasez de gasolina, por ejemplo, se debe a la falta de mantenimiento y operaciones en las refinerías venezolanas prácticamente abandonadas desde hace una década. La exportación de petróleo ha disminuido a menos de 400,000 barriles por día, el nivel más bajo en casi 80 años.
Sanciones efectivas
El Gobierno Trump se convirtió en el principal aliado en la lucha por la democracia en Venezuela. Es el que ha emitido más sanciones contra el chavismo por sus constantes violaciones a los derechos humanos y debido a la corrupción liderada por Maduro.
Trump ha sancionado a más de 100 funcionarios del chavismo; estableció un embargo petrolero recortándole los ingresos a Maduro; la justicia estadounidense ha investigado y condenado casos de narcotráfico y lavado de dinero desde la estatal petrolera Pdvsa; y desde el Senado se impulsa una ley para presionar aún más al régimen.
Las sanciones que ha llevado a cabo la administración Trump ha dejado a Pdvsa sin la mayoría de sus clientes a largo plazo. La incautación de 1.1 millones de barriles de combustible hecha por efectivos norteamericanos a buques provenientes de Irán arrinconan aún más al régimen de Maduro.
Las medidas tomadas por el Gobierno Trump también lograron quebrar a CV Shipping Pte Ltd (CVS), una empresa conjunta entre Venezuela y China, que se declaró en bancarrota luego de que las sanciones estadounidenses surtieran efecto; una acción que también dejó a Pdvsa sin tres de sus grandes buques petroleros.
Asimismo, entidades bancarias y compañías financieras como la sociedad financiera UBS decidieron cortar los lazos con venezolanos millonarios en Estados Unidos relacionados con la dictadura de Maduro. La decisión de la entidad financiera surgió en medio de las sanciones internacionales contra la tiranía, donde administraciones como las de Trump prohíben negocios con funcionarios del chavismo.
Sabrina Martín Rondon is a Venezuelan journalist. Her source is politics and economics. She is a specialist in corporate communications and is committed to the task of dismantling the supposed benefits of socialism // Sabrina Martín Rondon es periodista venezolana. Su fuente es la política y economía. Es especialista en comunicaciones corporativas y se ha comprometido con la tarea de desmontar las supuestas bondades del socialismo