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El pasado fin de semana, John Durham, exfiscal y abogado especial del Departamento de Justicia, reveló una investigación en donde concluyó que los abogados de la campaña de Hillary Clinton pagaron a una empresa llamada “Tech Executive 1” para que se infiltrara en la campaña de Donald Trump y crear una narrativa de injerencia rusa y así alterar el curso de las elecciones presidenciales del 2016. Algo que evidentemente no lograron. Pero al no conseguirlo, y tras perder las elecciones, el equipo de Clinton insistió y atacó a los servidores de la Casa Blanca para crear la teoría del “Russiagate” y tratar de destruir la popularidad del ya presidente Trump.
Pese a lo escandaloso de dichas acusaciones, algo que podría llegar a ser incluso más grande que Watergate, la prensa liberal americana no ha publicado los detalles de la investigación de Durham, y los demócratas no se han referido al tema.
Mientras tanto, rápidamente el lunes por la mañana, los medios americanos sonaron las alarmas de una presunta invasión en Ucrania, luego de que el presidente Volodímir Zelenski ironizara al respecto debido a las presiones de la prensa.
Citando frases fuera de contexto del mandatario ucraniano y sin alertar el cinismo, en Estados Unidos se dio por sentado que Rusia invadiría Ucrania el próximo miércoles 16. La oficina de comunicaciones de Zelenski tuvo que atajar rápidamente el asunto y advertir que se trataba de un comentario irónico.
Resulta que desde la semana pasada el Gobierno ucraniano ha dicho que no ve ninguna amenaza de invasión por parte de Rusia. De hecho, ayer por la mañana el secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa dijo que “la situación está completamente bajo control y, es más, no vemos actualmente que pueda tener lugar una invasión a gran escala de la Federación Rusa el día 16 o 17. No lo vemos”.
Parece que, tras la insistencia de las alarmas de guerra por parte de la prensa occidental, Zelenski se cansó y bromeó al respecto diciendo que la invasión era inminente, lo que rápidamente se difundió en Estados Unidos.
Además, recientemente, Rusia anunció que retiraría tropas de la frontera con Ucrania, tras, según ellos, culminar ejercicios militares.
Según las comunicaciones que provienen de Ucrania y Rusia, no pareciera venir una guerra en el corto plazo, sin embargo, la administración Biden ha convencido al mundo entero de que el conflicto está a la vuelta de la esquina y que hay que prepararse, generando tensiones al otro lado del planeta.
La pregunta es: ¿realmente hay tambores de guerra o en Washington están buscando un conflicto para desviar la atención de los americanos sobre el muy cuestionado y rechazado Gobierno de Joe Biden?
Emmanuel Rincón is a lawyer, writer, novelist and essayist. He has won several international literary awards. He is Editor-at-large at El American // Emmanuel Rincón es abogado, escritor, novelista y ensayista. Ganador de diversos premios literarios internacionales. Es editor-at-large en El American