El gobernador de Florida, Ron DeSantis, que buscará un nuevo mandato en las elecciones de este año, afirmó este miércoles que considera “muy razonable” prohibir el aborto después de las 15 semanas de embarazo como proponen dos proyectos de ley presentados la víspera en el Congreso floridano.
En una rueda de prensa ofrecida en Bonita Springs, el republicano DeSantis dijo no conocer al detalle los proyectos de los legisladores de su mismo partido Erin Grall y Kelli Stargel, uno presentado ante la cámara baja y el otro ante el Senado, que, de ser aprobados, cambiarán de 24 a 15 el máximo de semanas de gestación hasta las que una mujer puede someterse en Florida a un aborto legal.
“Obviamente apoyo las 15 semanas. Creo que eso es muy razonable y creo que es muy consistente con apoyar la protección de la vida”, subrayó.
“Creo que será algo que podamos firmar y creo que mucha gente estará muy contenta con eso”, agregó.
Las propuestas de Grall y Stargel, que con el apoyo de DeSantis pueden ser aprobadas sin dificultad dado que ambas cámaras del Congreso floridano están bajo control del Partido Republicano, son similares a otras planteadas en estados conservadores.
Además de los proyectos de Grall y Stargel, hay otro proyecto a trámite en el Congreso floridano que propone restringir el derecho al aborto como en Texas y fue presentado el pasado 22 de septiembre.
El llamado proyecto de ley “Latidos del corazón”, propuesto por Webster Barnaby, prohíbe que los médicos realicen o induzcan un aborto si se detecta un latido fetal, pero establece excepciones en caso de violación, incesto, violencia doméstica, trata de personas o una condición que amenaza a la madre.
Sin embargo, las mujeres que invoquen dichas excepciones deberán presentar documentación, como una orden de restricción, registro médico u orden judicial, para abortar legalmente.
En virtud de este proyecto de ley se pueden presentar demandas por infracciones y hay posibilidad de reparaciones civiles y daños.
