Read in English
El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, aclaró este lunes que las agencias gubernamentales también serán multadas con $5,000 si llegan a exigir prueba de vacunación a sus usuarios, empleados o clientes, lo cual supone una ruptura de la ley estatal.
“Si una agencia gubernamental en el estado de Florida fuerza una vacuna como condición para el empleo, eso viola la ley estatal, y enfrentará una multa de $5,000 por cada violación”, dijo DeSantis.
La aclaratoria de DeSantis responde al anuncio del presidente Joe Biden de instaurar un mandato de vacunación obligatoria contra el COVID-19 para las empresas con más de 100 trabajadores, y que afectaría a cerca de 100 millones de americanos.
El gobernador, quien considera que el mandato de Biden es “intrusivo e ilegal“, se refirió a la ley conocida como SB 2006, promulgada por su despacho en mayo, que impide a entidades públicas y privadas exigir prueba de vacunación a empleados, usuarios y clientes, y que se complementa con la Orden Ejecutiva firmada por DeSantis en abril para prohibir la expedición de pasaportes de vacunación para los floridenses.
En ese sentido, el Departamento de Salud estatal emitió una normativa que impone una multa de $5,000 a entidades, negocios, escuelas y agencias gubernamentales que quebranten la ley SB 2006.
“Estamos hoy aquí para dejar muy claro que apoyaremos a los hombres y mujeres que nos sirven, vamos a proteger los trabajos en Florida, y no vamos a dejar que nadie sea despedido por el mandato de vacuna obligatoria”, dijo DeSantis. “No puedes solo desechar a la gente que ha servido fielmente por lo que es una decisión personal sobre su salud individual”, continuó.
La norma entrará en vigencia este jueves y, aunque las entidades sancionadas podrán apelar la multa, las sanciones vencerán dentro de los 30 días posteriores.
