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El excéntrico billonario y CEO de Tesla y Space X, Elon Musk, ha vuelto a llamar la atención en redes sociales por su última crítica al plan de impuestos del presidente Joe Biden, puntualmente al impuesto a las ganancias sobre capital no realizado, es decir, sobre la valorización del precio de los activos.
Por años Estados Unidos ha tenido un impuesto sobre el 20 % de las ganancias de capital. Es decir, si una persona compra un activo —que puede ser desde participación en una empresa o un condominio en Nueva York— el Gobierno y los estados cobran un impuesto sobre la valorización de este al día que se venda.
La novedad del nuevo impuesto que propone el presidente del Comité de Finanzas del Senado, Ron Wyden (D, OR), es que éste podría cobrar al 1 % de los americanos de mayores ingresos, impuestos sobre la valorización de su patrimonio sin que ellos hayan vendido nada. Este sería, tal como lo confirmó la representante Nancy Pelosi, un impuesto a la riqueza.
Según un artículo de The Washington Post, con el impuesto a la riqueza Elon Musk y Jeff Bezos podrían pagar hasta $50,000 millones y $44,000 millones respectivamente en 10 años.
A pesar de las elevadas sumas que tendría que pagar el 1 % más rico de Estados Unidos, Musk notó que, según las propias estimaciones de los proponentes del impuesto, este solo cubriría el 10 % del costo del plan de capital humano impulsado por el Partido Demócrata.
“¿De dónde vendrá el otro 90 %? La respuesta eres tú”, añade Musk en su tuit.
Elon Musk critica el alto nivel de endeudamiento del Gobierno
“Incluso si imponen un impuesto del 100 % a todos los multimillonarios solo haría una pequeña brecha en el número, así que el resto deberá venir del público general”, menciona Musk en la continuación de su hilo. Según el Reloj de la Deuda de Estados Unidos esta podría llegar a los $29 billones y la deuda por contribuyente americano se sitúa en los $229,705.
Musk también menciona el crecimiento astronómico de la deuda federal que en el año 2000 equivalía al 56 % del PIB y hoy supera el 126 % “y escalando rápido”, anota Musk.
El domingo, en las respuestas a un tuit de Mr. Whale que muestra un vídeo de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, hablando sobre la necesidad de imponer un impuesto “a los activos líquidos —como acciones de compañías— en posesión de individuos extremadamente ricos”, Musk comentó “democracia esclerótica”.
En otro tuit Elon Musk explicó su raciocinio en contra de más impuestos al 1 %: “Al final la discusión se resume a quién es mejor en alocar capital —el gobierno o los empresarios—. Los payasos confundirán ubicación de capital con consumo”.
No es la primera vez que Elon Musk critica a la administración Biden
En el pasado Musk se ha burlado de la administración Biden afirmando que el presidente “sigue durmiendo”, en una clara referencia a la mofa que lo llama sleepy Joe. El pleito de Musk con la administración demócrata no solo es por cuestiones tributarias sino por la ejecución que se le dará al dinero del plan de infraestructura, que cuenta con cuantiosos subsidios a la demanda de autos eléctricos.
Aunque en teoría Tesla debería celebrar que más dinero se canalice a la industria de automóviles eléctricos, este dinero irá a parar en manos de sus competidores americanos como GM, Ford, Chrysler o Stellanis, pues los subsidios a la compra de autos eléctricos contemplan que solo se destinen para autos fabricados con mano de obra sindicalizada, y Tesla no permite sindicatos dentro de sus plantas.
En el presente el Gobierno devuelve hasta $7,500 en impuestos a los contribuyentes por la compra de un auto eléctrico, en el futuro estas devoluciones podrían ser de hasta $12,000, pero solo para autos de compañías que permiten sindicatos, lo que pondría a Tesla en desventaja con sus competidores.
Economist, writer and liberal. With a focus on finance, the war on drugs, history, and geopolitics // Economista, escritor y liberal. Con enfoque en finanzas, guerra contra las drogas, historia y geopolítica