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Es más que evidente que la compra de Twitter por parte de Elon Musk es una buena noticia para todos los que amamos la libertad. Podemos decirle adiós o, al menos, confiar en que se reducirán los shadowbans, los bloqueos de cuentas incómodas y la prohibición de cuestionar al establishment en cuanto a la ideología LGBT, temas raciales, COVID, entre otros.
Sin embargo, entre comentarios que dicen que este es el equivalente del siglo XXI al fin de la esclavitud y demás escritos triunfalistas, parece que no está claro que Elon Musk se enfrenta a un reto enorme y que, aunque es una mejoría significativa frente a los reyes-filósofos de Silicon Valley, tampoco se alinea al movimiento conservador en Estados Unidos y el mundo.
El primer gran reto de Elon Musk es interno: lidiar con el propio personal de Twitter, que intentará sabotearlo, y con los problemas de deuda de Twitter, aunque ya logró una extensión de un año.
Segundo, está la inmensa presión política a la que se enfrentará en Estados Unidos y Europa, quienes quieren mantener las políticas de “moderación de contenido” impuestas previamente. A su vez, son ampliamente conocidos los vínculos comerciales de Musk a través de Tesla con el régimen chino: ¿cederá ante la presión si el régimen chino le pide censurar contenido o se enfrentará a potenciales pérdidas en Tesla? Está por verse.
Nada de esto quiere decir que la compra de Twitter no sea una buena noticia. Ciertamente, lo es. Es refrescante poder decir verdades básicas de la biología sin sentir temor de ser suspendido. Sin embargo, Musk se enfrentará al resto de Silicon Valley y la administración Biden. En última instancia, es un empresario, no un político o un benefactor. Va a actuar en función a su bolsillo. Por ahora, eso se alinea con los amantes de la libertad.
Este artículo apareció originalmente en el Newsletter de El American del 27 de abril de 20. ¡Suscríbete gratis aquí!
Edgar is political scientist and philosopher. He defends the Catholic intellectual tradition. Edgar writes about religion, ideology, culture, US politics, abortion, and the Supreme Court. Twitter: @edgarjbb_ // Edgar es politólogo y filósofo. Defiende la tradición intelectual católica. Edgar escribe sobre religión, ideología, cultura, política doméstica, aborto y la Corte Suprema. Twitter: @edgarjbb_