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Embajador de Petro amenaza a venezolanos en Colombia

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El embajador de Gustavo Petro en Venezuela, Armando Benedetti, llegó al cargo listo para convertir a su país en un aliado de la tiranía chavista de Nicolás Maduro. El día que pisó Caracas, para entregarle las credenciales a Maduro, visitó a varios funcionarios chavistas. Todos acusados de o violaciones de derechos humanos o narcotráfico o lavado de dinero.

Las imágenes son desagradables. Benedetti abrazado de Diosdado Cabello, acusado de narcotráfico, jefe del Cartel de los Soles y cuya cabeza vale $10 millones para la justicia americana. Risas y apretones. Benedetti junto a Tareck El Aissami, acusado de narcotráfico en Estados Unidos y ligado al terrorismo islámico. Benedetti junto al ministro de Defensa Padrino López, responsable de las masacres de 2017 contra la oposición venezolana, de torturas y sancionado por varios países. Y así, la lista.

Pero lo peor no es el trágico espectáculo autoritario o algunas declaraciones como la de que Colombia retirará la demanda contra Maduro en la Corte Penal Internacional, sino lo que le espera a los venezolanos. Y no solo a los venezolanos en su país, gobernados por el régimen opresor, sino también a los venezolanos en Colombia.

En la tarde de este 7 de septiembre, el embajador Benedetti tuiteó: “Ya está activada la cooperación judicial entre Venezuela y Colombia”.

Hasta ahora, el argumento del Gobierno de Gustavo Petro para restablecer las relaciones con un régimen que hasta hace un par de meses Colombia, bajo el Gobierno del expresidente Iván Duque, desconocía, era estrictamente económico.

Es decir, aunque Petro reconocía que Maduro era un dictador, consideraba que se debían restablecer las relaciones con Venezuela amén de la estabilidad económica entre ambas naciones. Sin embargo, el espíritu ideológico y claramente autoritario en Petro y sus funcionarios siempre asomó la posibilidad de que las intenciones fueran mucho más allá de lo económico.

Para el muy prestigioso y destacado diplomático venezolano Diego Arria, el tuit de Benedetti es una clara amenaza a los venezolanos en Colombia.

“Evidentemente es una amenaza a la oposición. Es una amenaza poco menos que sutil a los que están en Colombia. Lo que ellos llaman ‘cooperación judicial’ sería la entrega de venezolanos al régimen de Maduro”, dijo Arria en una entrevista.

“Petro está revelando sus verdaderos colores con una velocidad que yo no me imaginaba”, agregó Arria.

Un porcentaje importante de los perseguidos políticos de Maduro se asilaron en Colombia, el país en el que se concentran la mayoría de los venezolanos fuera de su país. Muchos recibieron el asilo del Gobierno de Iván Duque, adversario del de Maduro. Ahora que llega a la casa presidencial de Nariño un jefe de Estado afín ideológicamente al chavismo, el temor es que cambie la condición de los perseguidos políticos.

Cuando Benedetti habla de “cooperación judicial”, difícilmente se refiere a colombianos en Venezuela. Aunque los principales grupos guerrilleros colombianos como las FARC y el ELN hoy operan desde Venezuela, el Gobierno de Petro aclaró que no los perseguirá judicialmente. En cambio, espera que acompañen procesos de diálogo y paz. Esa ha sido una piedra angular de las propuestas de Petro.

En cambio, el régimen de Maduro sí tiene interés en varios de los venezolanos que hoy se refugian en Colombia, como algunos de los funcionarios del Gobierno interino de Guaidó, periodistas y activistas disidentes.

La amenaza de Benedetti, para nada sutil, como dijo Arria, debe enfrentarse al mayor repudio de los demócratas del mundo. Es vergonzoso que un país con una tradición democrática tan amplia como la de Colombia, con un apego a las libertades y una experiencia anti-subversiva tan latente, hoy se postre a los pies ensangrentados de una tiranía como la de Maduro.

Lo que Benedetti hace debería de ser considerado traición. Y, eventualmente, una violación de los derechos humanos. Quien estrecha las manos de asesinos también se empapa de sangre.

Orlando Avendaño is the co-editor-in-chief of El American. He is a Venezuelan journalist and has studies in the History of Venezuela. He is the author of the book Days of submission // Orlando Avendaño es el co-editor en Jefe de El American. Es periodista venezolano y cuenta con estudios en Historia de Venezuela. Es autor del libro Días de sumisión.

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