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El Departamento de Estado anunció este miércoles que Estados Unidos reabrirá su embajada en Kiev, la capital de Ucrania, tras tres meses cerrada para “reubicar el personal” por seguridad.
En un comunicado publicado el miércoles por la tarde, el secretario de Estado, Antony J. Blinken enfatizó que, aunque Estados Unidos “bajó su bandera” de la embajada en Kiev en febrero, “esto de ninguna manera impediría nuestro compromiso” con Ucrania y los aliados europeos.
“Hoy estamos reanudando oficialmente las operaciones en la Embajada de los Estados Unidos en Kiev”, continuó Blinken en el comunicado. “El pueblo ucraniano, con nuestra asistencia de seguridad, ha defendido su patria frente a la inescrupulosa invasión de Rusia y, como resultado, las barras y estrellas vuelan sobre la embajada una vez más”.
Apoyo a Ucrania, más allá de la embajada
Blinken reiteró que Estados Unidos apoya “con orgullo” al gobierno y la ciudadanía ucraniana, que se defiende de la “brutal guerra de agresión” del Kremlin. Además, informó que han “mejorado” las medidas y protocolos de seguridad para los diplomáticos americanos que regresan a Kiev.
“Estamos comprometidos a enfrentar los desafíos que se avecinan”, continuó el secretario de Estado. “La guerra continúa. Las fuerzas de Rusia infligen muerte y destrucción en suelo ucraniano todos los días. Millones de ucranianos están desplazados de sus hogares y lloran la pérdida de sus seres queridos. Con fuerza de propósito, reafirmamos nuestro compromiso con el pueblo y el gobierno de Ucrania, y esperamos llevar a cabo nuestra misión desde la Embajada de los Estados Unidos en Kiev”.
Rusia invadió Ucrania por el este el pasado 21 de febrero en lo que Vladimir Putin llamó una “operación militar especial”, que ya ha dejado un saldo de 3,668 ucranianos fallecidos (entre ellos, 69 niños y 176 adolescentes) y 3,896 heridos.
Días antes, el 14 de febrero, Estados Unidos cerró su embajada para trasladar sus operaciones a la ciudad de Lviv, a unos 550 kilómetros al oeste de Kiev, ante informes de inteligencias que sugerían que un ataque a la capital ucraniana era inminente.
