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El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, firmó este lunes una legislación que prohíbe “piquetes y protestas” a las afueras de residencias privadas.
La legislación HB 15-71, que fue presentada ante la Cámara de Florida a principios de enero, establece que es “ilegal que una persona haga piquetes o protestas en frente o alrededor de la vivienda de cualquier persona con la intención de acosar o molestar a esa persona en su vivienda”.
Florida protege a sus residentes
En un comunicado, el gobernador DeSantis dijo que enviar “turbas rebeldes” a las residencias privadas, “como hemos visto con las multitudes enojadas frente a las casas de los jueces de la Corte Suprema”, es una conducta inapropiada y debe ser condenada.
“Este proyecto brindará protección a quienes viven en comunidades residenciales y me complace convertirlo en ley”, dijo DeSantis.
Una vez que la ley entre en vigor el próximo 1 de octubre, los piquetes y protestas frente a residencias privadas con el fin de intimidar a quienes viven ellas serán considerados delitos menores de segundo grado. Según los estatutos de Florida, dichos delitos son punibles hasta con $10,000 de multa.
La oficina de DeSantis aclaró que las fuerzas del orden público deberán emitir una advertencia a las personas que protesten frente a residencias privadas y de no responder al llamado de las autoridades, los manifestantes podrán ser arrestados.
