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Stephen Miller, exasesor de la Casa Blanca de la administración Trump en materia de inmigración, criticó la apertura y el ingreso de migrantes a Estados Unidos. Dijo que la agenda en esta materia del presidente Joe Biden creará una crisis migratoria en la frontera.
“La legislación presentada por el presidente Biden y los demócratas del Congreso borraría fundamentalmente la esencia misma de la nacionalidad de Estados Unidos. Por primera vez, creo que, en la historia de la humanidad, esta legislación propone enviar solicitudes a los inmigrantes ilegales previamente deportados y darles la oportunidad de volver a entrar en el país por un camino rápido hacia la ciudadanía. Esto es inaudito”, sentenció.
El exfuncionario en Fox News criticó la medida que a su juicio amenaza la seguridad publica de los americanos.
“¡Esta administración ya ha desmantelado la seguridad fronteriza, cancelando los acuerdos históricos del presidente Trump con México y con los países del triángulo norte, restaurando la captura y liberación y, además, destripando la aplicación de la ley en el interior, emitiendo un memorando, impidiendo que el ICE elimine a la gran mayoría de los inmigrantes ilegales criminales que encuentra!”
Y agregó: “¡Esta es una opción política disfrazada falsamente ante el tribunal y el país como una cuestión de recursos!”.
El jueves, Biden dio a conocer su ambicioso plan de inmigración, una propuesta para ofrecer una vía de ocho años a la ciudadanía a unos 11 millones de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos. La legislación fue presentada por los congresistas demócratas en el Capitolio y pretende suavizar las restricciones a la inmigración basada en la familia.
Advirtió que “liberar a los inmigrantes ilegales con antecedentes penales en las ciudades estadounidenses costará vidas”.
Miller también planteó la cuestión de la concesión de la ciudadanía a los inmigrantes poco cualificados, subrayando que supondrá una transferencia fiscal neta de billones de dólares a largo plazo para pagar la seguridad social y otros gastos médicos.
“Así que pregúntense, ¿quién va a pagar la educación? ¿Qué significa cuando las aulas, si Dios quiere, vuelvan a abrirse? ¿Qué significa para el tamaño de las aulas? ¿Qué significa para la sanidad? Es un gasto extraordinario dar eso a 20 millones de inmigrantes ilegales”, dijo.
