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La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, culpó al primer ministro británico, Boris Johnson, por la negativa del presidente Biden a responder preguntas mientras los dos líderes se encontraban en la Oficina Oval durante su reunión del martes.
Al cabo de la conversación, Johnson tomó la iniciativa de responder “sólo un par” de preguntas de los reporteros británicos presentes, pero el equipo de la Casa Blanca cortó abruptamente la rueda de prensa y expulsó a los periodistas de la oficina antes de que cualquier reportero obtuviese una respuesta por parte de Biden.
El reportero de CBS News, Ed O’Keefe, le preguntó a Psaki su impresión sobre por qué “el primer ministro británico en la Oficina Oval de Estados Unidos llamó a un reportero británico, y luego, cuando los reporteros americanos intentaron llamar al presidente Biden, nos escoltaron hacia afuera”.
“Bueno, creo que nuestra relación con el Reino Unido y con el Primer Ministro Johnson es tan fuerte y duradera que podremos avanzar respecto a esto, pero él llamó a personas de su cuerpo de prensa sin alertarnos sobre esa intención de antemano”, respondió Psaki.
Psaki recibió una queja formal en su oficina
Inmediatamente después de la reunión, O’Keefe dijo en Twitter que había intentado preguntarle a Biden sobre la situación en la frontera sur, pero la respuesta del presidente fue “indescifrable” debido al ruido de los reporteros que abandonaban la oficina.
“Hemos reproducido la cinta y parte de la respuesta del presidente es descifrable”, agregó en un tweet posterior. “Le pregunté por su respuesta a la situación en la frontera sur y dijo en parte: “La violencia no está justificada””.
El presidente de la Asociación de Corresponsales de la Casa Blanca, Steven Portnoy, presentó junto a su equipo una queja formal en la oficina de Psaki.
Portnoy también acudió a Twitter momentos después, y dijo que Joe Biden “señaló que era hora de que la prensa se fuera, sin responder preguntas”, luego de que Johnson “reconoció a sus reporteros”.
