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El Senador Joe Manchin se opondrá al proyecto de ley de infraestructura de Biden

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Este lunes, el senador Joe Manchin (D-WV) dijo en una entrevista de radio a una emisora de Virginia Occidental que el enorme proyecto de ley de infraestructura de Biden necesita ser modificado de forma significativa, especialmente en el tema de los impuestos a las empresas, para conseguir su apoyo. Dado que el Senado está dividido a partes iguales entre demócratas y republicanos, la opinión de Manchin en este asunto es crucial para la supervivencia del proyecto favorito de Biden.

Su oposición al proyecto de ley actual adquirió mayor importancia después de que el parlamentario del Senado dictaminara que los demócratas pueden aprobar dos proyectos de ley adicionales relacionados con el presupuesto a través del proceso de reconciliación, lo que les permite eludir el Filibuster y sacar adelante su legislación con sus 50 senadores más la vicepresidenta Harris.

Que Manchin se oponga abiertamente a la línea de su partido no es algo nuevo, de hecho, se ha convertido en un titular muy habitual durante la todavía incipiente Administración Biden. Tampoco es una sorpresa, Manchin vive en un estado extremadamente rojo y era obvio para muchos la enorme cantidad de poder que el virginiano occidental ejercería en un Senado dividido por igual. Sin embargo, es muy revelador que haya estado tan dispuesto a lanzar golpes a los planes planteados por Biden, Pelosi, Schumer y otros.

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El presidente Biden tendrá que convencer a un senador en particular para que respalde su inmenso proyecto de ley de infraestructura (EFE)

Manchin se ha opuesto continua y vehementemente al renovado impulso de los demócratas para derogar la regla del filibuster en el Senado, ha hundido el nombramiento de la persona designada por Biden para la OMB, se ha opuesto a la subida de 15 dólares del salario mínimo y es el único senador demócrata que no ha copatrocinado el controvertido proyecto de ley de reforma electoral “For the People”.

Aunque el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (D-NY), y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-CA), son los demócratas de más alto rango en el poder legislativo, la aritmética del Senado convierte a Manchin en el hombre más poderoso del Capitolio, y el de Virginia Occidental disfruta de su nuevo poder.

La perdición de los progresistas

Cuando Obama ganó las elecciones de 2008, los demócratas encontraron una dura y eficaz oposición por parte del GOP, y Mitch McConnell (R-KY) se convirtió en el objetivo de las pesadillas de los demócratas al organizar la oposición republicana a la agenda legislativa de Obama, obstaculizando las ambiciosas políticas de los demócratas.

Casi once años después de la última vez que los demócratas tuvieron el control unificado del gobierno federal, aunque McConnell siga en su puesto y el GOP tenga aún más senadores que entonces, es Manchin quien se ha encargado de frenar las ideas más radicales del ala progresista del partido.

Esto ha enfurecido a muchos íconos progresistas en el Congreso, ya que muchos demócratas pretenden aprobar el mayor número posible de proyectos de ley expansivos antes de que llegue una de las leyes de hierro de la política estadounidense -que el partido en el poder pierda las elecciones intermedias- un par de años después.

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Manchin has awakened the ire of many progressives, but there is really nothing they can do (EFE)

Bernie Sanders (I-VT) dijo que no tiene problema en ir a Virginia Occidental y crear un movimiento de base que presione al senador para que apoye la subida del salario mínimo de 15 dólares. Alexandra Ocasio-Cortez (D-NY) también criticó duramente al senador Manchin por su indecisión inicial en la votación de confirmación de la secretaria del Interior Deb Haaland, acusándolo de tener un doble estándar contra la primera nominación del gabinete de una nativa americana (Manchin terminó votando a favor de la confirmación).

Los progresistas no se han limitado a publicar tuits o a amenazar con ir a Virginia Occidental para hacer campaña contra él, sino que algunos se han tomado el trabajo por su cuenta, y Newsweek ha informado de que un PAC progresista “No Excuses”, que había apoyado a AOC en el pasado, ha dicho públicamente que haría todo lo posible para intentar sustituir a Manchin y a la senadora Krysten Synema (D-AZ) por obstaculizar el progreso. Para ello han comenzado a publicar anuncios dirigidos contra ambos senadores presionándolos para que dejen sus tendencias moderadas y se lancen a la agenda progresista.

La mala noticia para Sanders, AOC o cualquier otro PAC progresista con ganas de gastar dinero en anuncios de ataque contra Manchin es que serían el equivalente político a trapear el mar. Manchin viene de uno de los estados más republicanos (si no el más) del país, con el Cook Political Report diciendo que el estado es un 19 % más republicano que el resto de la nación y con los conservadores teniendo una ventaja del 28 % sobre los liberales, según una encuesta de Gallup.

Una campaña pública de Bernie contra Manchin aumentaría, en todo caso, la popularidad del senador por Virginia Occidental. En realidad, si Bernie quiere realmente dañar las posibilidades políticas de Manchin y ponerlo en aprietos, debería planear una grandiosa gira de apoyo por todo el Estado de la Montaña.

A pesar de todo el rencor que la oposición de Manchin pueda crear dentro del partido, la realidad es que los demócratas siguen estando en el asiento del conductor en Washington D.C. y mientras Biden y Pelosi puedan estar al volante, Manchin es el que lleva la palanca de cambios.

Daniel is a Political Science and Economics student from the University of South Florida. He worked as a congressional intern to Rep. Gus Bilirakis (FL-12) from January to May 2020. He also is the head of international analysis at Politiks // Daniel es un estudiante de Cs Políticas y Economía en la Universidad del Sur de la Florida. Trabajo como pasante legislativo para el Representate Gus Bilirakis (FL-12) desde enero hasta mayo del 2020. Daniel también es el jefe de análisis internacional de Politiks.

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