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El nuevo mapa electoral del estado de Nueva York aprobado por los demócratas en medio de polémicas fue rechazado por un juez, que lo considera inconstitucional por buscar favorecer los intereses de ese partido.
La decisión del magistrado Patrick F. McCallister, de la Corte Suprema estatal, bloquea el uso de los nuevos distritos electorales dibujados de cara a las elecciones legislativas del próximo noviembre, aunque las autoridades neoyorquinas ya anunciaron que recurrirán.
McCallister, en un escrito publicado el jueves, dijo haber encontrado “pruebas claras y más allá de toda duda razonable” de que el nuevo mapa es “inconstitucional” y fue creado con “un sesgo político”.
El pasado febrero, el Partido Demócrata aprovechó su mayoría en la Asamblea y el Senado del estado de Nueva York para rediseñar las circunscripciones de cara al Congreso federal de una forma que, a priori, beneficiaría a sus candidatos.
En principio, los demócratas aparecen como favoritos en 22 de los 26 distritos electorales de este mapa, lo que permitiría al partido del presidente Joe Biden, ganar en Nueva York un puñado de asientos en las elecciones de noviembre, que se presentan cuesta arriba para los demócratas.
El Partido Republicano acusa a sus rivales de aplicar la táctica conocida como “gerrymandering”, ignorando los derechos de los votantes y buscando sólo consolidar su poder.
Además de los nuevos distritos para el Congreso federal, el juez ha bloqueado los nuevos mapas para las legislativas estatales, dando plazo hasta el 11 de abril para que se presenten propuestas con apoyo bipartidista.
Si eso no ocurre, el magistrado ha dicho que nombrará a una figura independiente para que se haga cargo de esa tarea, lo que podría forzar a retrasar las elecciones primarias, previstas para el próximo junio.
En un breve comunicado conjunto, la gobernadora del estado, Kathy Hochul, y la fiscal general, Letitia James, ambas demócratas, aseguraron que apelarán la decisión.
Los mapas electorales de cara a los próximos comicios, tanto los impulsados por demócratas como republicanos, han creado disputas en varios estados, que han tenido que redibujarlos recientemente tras el nuevo censo nacional, que se hace cada diez años.
