Así le confesó a POLITICO un congresista republicano, por supuesto en calidad de anónimo. Su afirmación describe los acontecimientos de la Cámara de una forma bastante acertada y precisa, al menos por ahora. Es cierto, Kevin McCarthy no tiene los votos necesarios para convertirse en portavoz, pero, a su vez, casi el 90 % del caucus republicano respalda su nombre para el puesto.
El pasado tres de enero, el nuevo Congreso entró en la historia al ser el primero en 100 en años en requerir más de una votación para elegir al portavoz de la Cámara de Representantes. Días después, la frase que resume la situación podría ser “qué le hace una mancha más al tigre”. Luego de seis votaciones, nadie consiguió los votos necesarios para reclamar el mazo.
Los últimos comicios internos arrojaron como primero al demócrata Hakeem Jeffries (212), luego al propio McCarthy (201), seguido por Byron Donalds (20), el candidato de la oposición republicana. Además, la congresista Victoria Spartz votó “presente”.
Los números son claros, de 222 miembros republicanos del caucus, 201 apoyan la candidatura del exlíder de la minoría. Un porcentaje interno muy alto, pero que, debido a la escasa mayoría republicana, no es suficiente.
A pesar del optimismo inicial de McCarthy, lo cierto es que la tendencia está lejos de favorecerlo. A medida que avanzaron las votaciones, el californiano fue perdiendo alguno que otro apoyo. Pasó de 203 votos a favor en la primera ronda a 201 en la última.
A pesar de las conversaciones puertas adentro sobre otros posibles candidatos a nominar, dentro del bando “solo Kevin”, no aparece haber otro apellido que no sea el de McCarthy. “No he escuchado ningún (nombre) y espero que no haya ninguno, porque él lo es (…) No vamos a retroceder”, aseguró representante Chris Smith (R-NJ).
Dentro del grupo de los “nunca Kevin”, la sensación es completamente diferente. “El presidente necesita decirle a Kevin McCarthy que, señor, no tiene los votos y es hora de retirarse”, manifestó Lauren Boebert (R-CO), generando un ruidoso murmullo en la Cámara Baja.
La congresista hizo referencia a Donald Trump, quien horas antes había respaldado públicamente al californiano. “REPUBLICANOS, NO CONVIERTAN UN GRAN TRIUNFO EN UNA DERROTA GIGANTE Y VERGONZOSA. ES MOMENTO DE CELEBRAR, TE LO MERECES. Kevin McCarthy hará un buen trabajo, y tal vez incluso un GRAN TRABAJO”, publicó Trump en Truth Social.
Además de estancar la agenda legislativa, esto tiene implicaciones para el personal. Por ejemplo, si no se resuelve la situación antes del próximo 13 de enero, las comisiones de la Cámara no podrán pagarles a los empleados.
Las nuevas concesiones de McCarthy al grupo “nunca Kevin”
Los republicanos no desperdiciaron la noche del miércoles y aprovecharon para negociar los términos de un posible acuerdo. Según trascendió, McCarthy habría aceptado a bajar a uno la cantidad de miembros necesarios para poder convocar una votación en contra del portavoz, a colocar más miembros del Freedom Caucus en el Comité de Reglas de la Cámara y a permitir votar leyes sobre el límite de mandatos en el Congreso y la seguridad fronteriza.
Sin embargo, no está claro si esto será suficiente para contentar a sus detractores y poder reclamar un mazo que se le viene escapando desde el 2015.
Joaquín Núñez es hincha de Racing Club de Avellaneda y licenciado en comunicación periodística por la Universidad Católica Argentina. Se especializa en el escenario internacional y en la política norteamericana // Joaquín Núñez is a fan of Avellaneda's Racing Club and has a degree in journalistic communication from the Universidad Católica Argentina. He specializes in the international scene and American politics.