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Los demócratas han estado presionando a sus compañeros senadores centristas Joe Manchin (WV) y Krysten Sinema (AZ) para que destruyan el filibusterismo y permitan la aprobación de una revisión federal de las elecciones del país. En un discurso el pasado martes, el presidente Biden dijo que eliminar el filibusterismo para permitir que este proyecto de ley se apruebe en el Senado era un paso necesario para defender la democracia contra la gran cantidad de leyes de “supresión de votantes” que están aprobando los estados republicanos. Los demócratas han arremetido contra las leyes de estados como Georgia, argumentando que son intentos poco disimulados de prohibir que los votantes de las minorías emitan su voto.
Sin embargo, aunque los demócratas han comparado muchas de estas leyes a la que podría ser la peor época de la historia americana (Biden las ha calificado de “Jim Crow 2.0”) la realidad es que hay menos supervisión y crítica sobre los estados demócratas que tienen las mismas normas en sus libros.
Los requisitos de identificación de Georgia no son una supresión de votantes
Cuando Georgia aprobó su controvertida ley electoral en 2021, el partido demócrata arremetió contra la ley como una evidente supresión de votantes. El presidente Biden mintió repetidamente y dijo que la ley restringiría las horas de votación, mientras que la fallida candidata a gobernadora Stacey Abrahams hizo un argumento engañoso similar. El New York Times criticó el proyecto de ley, diciendo que requeriría nuevos y estrictos requisitos de identificación (que los estudios demuestran que no tienen un efecto significativo de supresión del voto) para los votos en ausencia y que los votantes tendrían ahora menos tiempo para requerir uno.
En primer lugar, si bien es cierto que Georgia exige un documento de identidad para votar, también ofrece a los votantes una larga lista de formas de identificación aceptables para votar en persona (permiso de conducir, pasaporte americano válido, identificación militar con fotografía, etc.) y la ley sólo exige a los ciudadanos que den su número de identificación al presentar un voto por correo, permitiendo a los ciudadanos presentar una fotocopia de su documento de identidad válido si no tienen un número de identificación.
Además, Georgia también ofrece a sus ciudadanos la posibilidad de recibir una tarjeta de identificación de votante gratuita para aquellos que no tengan ningún tipo de identificación válida. De hecho, tras la aprobación de la controvertida ley electoral el año pasado, el número de georgianos sin identificación estatal válida se ha reducido (menos del 2% de los votantes registrados no tienen una identificación válida), lo que no es la política de un estado que intenta recrear el sistema opresivo de Jim Crow que impedía votar a millones de americanos antes del movimiento por los derechos civiles.
Georgia permite más tiempo y formas de votar que Delaware o Connecticut
Además, si pedir nuevos requisitos para acceder al voto por correo es una clara muestra de supresión de votantes, entonces Connecticut y Delaware son las tierras de ensueño de George Wallace, ya que ninguno de los dos estados tiene el voto por correo sin excusa (a diferencia de Georgia). Para empeorar las cosas para ambos estados, mientras que Georgia fue criticada por reducir el número de buzones en su nuevo proyecto de ley, ni la ley de Delaware ni la de Connecticut permiten buzones en absoluto.
Otro frente en el que Georgia lleva la delantera a Delaware, Connecticut e incluso a Nueva York en el ámbito de la capacitación de los votantes es el del registro automático de votantes. El estado del melocotón, que fue objeto de un boicot por su nueva ley de voto, ha establecido un sistema de registro automático de votantes en 2016, permitiendo que sus ciudadanos se registren para votar cuando presenten una solicitud de licencia. Connecticut siguió el ejemplo de Georgia en 2018, Delaware no aprobó un sistema de registro automático de votantes hasta 2021 (que entrará en vigor en 2023) y Nueva York no cuenta con un sistema de registro automático de votantes.
Otro campo en el que Georgia facilita el voto en comparación con Delaware, Connecticut u otros estados demócratas es el voto anticipado. Mientras que Georgia permite a todos los votantes elegibles emitir su voto en persona durante diecinueve días antes de las elecciones, Connecticut ni siquiera tiene la opción del voto anticipado en su ley estatal, Delaware sólo ha aprobado recientemente una ley que haría posible el voto anticipado, pero incluso ese nuevo período sería mucho más corto (9 días) que la disposición de Georgia.
Delaware y Connecticut no son los únicos lugares que tienen un período de votación anticipada más corto que el de Georgia. Nueva Jersey (9 días), Nevada (14 días), Nuevo México (14 días), Nueva York (9 días), Washington D.C. (5 días), Massachusetts (7 días) y Maryland (7 días) dan menos tiempo a los votantes para emitir su voto antes del día de las elecciones que Georgia.
Si el presidente Biden considera que pedir requisitos de identificación (y luego dar identificaciones gratuitas para votar) para emitir un voto ausente, tener 17 días de votación anticipada, y tener un exitoso programa de registro automático de votantes es comparable a Jim Crow, entonces el Congreso debería actuar inmediatamente ante la clara emergencia democrática que está ocurriendo en algunos estados profundamente azules de todo el país.
Daniel is a Political Science and Economics student from the University of South Florida. He worked as a congressional intern to Rep. Gus Bilirakis (FL-12) from January to May 2020. He also is the head of international analysis at Politiks // Daniel es un estudiante de Cs Políticas y Economía en la Universidad del Sur de la Florida. Trabajo como pasante legislativo para el Representate Gus Bilirakis (FL-12) desde enero hasta mayo del 2020. Daniel también es el jefe de análisis internacional de Politiks.