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Uno menos: Larry Hogan se baja de la carrera republicana hacia 2024

Larry Hogan

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El año previo a la elección presidencial suele ver un gran desfile de candidatos en el partido que no está en el poder. Sin embargo, el 2023 ya presentó su primera anomalía a esta regla y se llama Larry Hogan. El exgobernador de Maryland era visto como uno de los potenciales rivales de Donald Trump, pero finalmente decidió que no tomará el tren hacia 2024.

Hogan reveló su decisión en el programa Face the Nation (CBS), donde aclaró que se trató de una decisión enteramente “personal” y que no tiene “ningún deseo” de someter a su familia a “otra campaña agotadora solo por la experiencia”.

“Lo consideré seriamente, y hablé con gente de todas partes, y hablé con mi familia y fue una decisión difícil, pero he decidido que no seré candidato a la nominación republicana a la Presidencia. Fue como, no necesitaba ese trabajo. No necesitaba presentarme a otro cargo. Realmente lo estaba considerando porque pensé que era un servicio público y tal vez puedo hacer una diferencia”, indicó el exgobernador.

En cuanto al reto de desafiar a Donald Trump, Hogan aseguró que “eso no me asustó realmente”. “Sería una carrera dura. Y él es muy duro. Pero, ya sabes, yo vencí a un cáncer potencialmente mortal. Así que tener a Trump insultándome en Twitter no me asustó realmente”, sumó al respecto.

Además, llamó el GOP a alejarse del expresidente. “Para volver a ser un partido de gobierno de éxito, debemos pasar página a Donald Trump. Hay varios líderes republicanos competentes que tienen el potencial para dar un paso adelante y liderar. Pero lo que está en juego es demasiado alto para que me arriesgue a ser parte de otro choque múltiple que potencialmente podría ayudar al Sr. Trump a recapturar la nominación”, manifestó.

Hogan también analizó el estado de las primarias republicanas, en concreto a través del binomio Trump-DeSantis. “En este momento, tienes, ya sabes, a Trump y [Ron] DeSantis en la parte superior del campo, están absorbiendo todo el oxígeno, recibiendo toda la atención, y luego un montón de nosotros en un solo dígito y cuantos más de ellos tienes, menos posibilidades tienes de que alguien se levante”, continuó.

Según Hogan, ser gobernador es un gran punto de partida para convertirse en presidente. Aseguró que actualmente “tenemos un montón de grandes gobernadores a tener en cuenta” y que si bien “Ron DeSantis y yo tenemos estilos diferentes, ciertamente tiene todo el derecho de salir y presentarse”.

Con la salida del exgobernador, la nominación republicana se encuentra en una carrera a tres bandas entre Donald Trump, Nikki Haley y el empresario Vivek Ramaswamy. Entre los potenciales candidatos, Hogan tuvo palabras de elogio hacia Mike Pence. Al ser consultado sobre si apoyaría eventualmente al exvicepresidente, no dudó al responder “absolutamente”. “Tengo un tremendo respeto por Mike Pence, y pensé que ciertamente, ya sabes, es el tipo de persona, está lleno de integridad y experiencia”, agregó.

Larry Hogan y su gestión en Maryland

Hogan aprovechó el envión de la ola roja del 2014 para ganar la gobernación de Maryland. En aquella oportunidad, se impuso con el 51 % de los votos, contra el 47 % del candidato demócrata. Cuatro años después, no se dejó intimidar por la ola azul y expandió considerablemente su margen de victoria, 55 % a 43 %.

Uno de los pocos republicanos en gobernar “The Old Line State” ha sido descrito como un “republicano moderado” y un “centrista”. Su gestión lo llevó a convertirse en uno de los gobernadores más populares del país. De acuerdo con Morning Consult, para 2022 era el tercer gobernador más popular de los Estados Unidos, solo superado por Charlie Baker (R-MS) y Phil Scott (R-VT). Curiosamente, los tres primeros eran republicanos al mando de estados bastante azules, como Massachusetts, Vermont y Maryland.

“Eliminamos o reescribimos miles de regulaciones que mataban empleos. Redujimos los impuestos ocho años seguidos en 4.700 millones de dólares, devolviendo todo ese dinero a los bolsillos de las familias trabajadoras de Maryland, a las pequeñas empresas y a los jubilados, y convertimos un déficit de 5.100 millones de dólares en el mayor superávit de la historia del estado. Marcamos el comienzo del mayor cambio económico de Estados Unidos, y dejamos el estado en una posición fiscal mucho mejor que nunca antes en la historia”, aseguró en su discurso de despedida.

Joaquín Núñez es licenciado en comunicación periodística por la Universidad Católica Argentina. Se especializa en el escenario internacional y en la política nacional norteamericana. Confeso hincha de Racing Club de Avellaneda. Contacto: [email protected] // Joaquín Núñez has a degree in journalistic communication from the Universidad Católica Argentina. He specializes in the international scene and national American politics. Confessed fan of Racing Club of Avellaneda. Contact: [email protected]

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