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Las Big Tech censuran con mucha más frecuencia a los congresistas del Partido Republicano que a los del Partido Demócrata. La organización Media Research Center (MRC) dice que por cada político demócrata censurado en redes sociales, hay 53 republicanos.
MRC también señala que las Big Tech no solo censuran a los congresistas activos, sino también a los aspirantes republicanos en campaña. El grupo menciona que candidatos republicanos han sido víctimas de censura en las redes sociales al menos unas 15 veces desde 2019.
En ese periodo de tiempo, no hallaron ninguna instancia de aspirantes al congreso por el Partido Demócrata que hayan sido censurados.
Por otra parte, representantes del Congreso como Marjorie Taylor Greene (R-GA) ha sido suspendida de twitter al menos 5 veces y cerca de 24 tweets han sido flaggeados con algún tipo de etiqueta de advertencia.
La censura también ha golpeado a senadores como Rand Paul (R-KY) y Ron Johnson (R-WI), cuyas cuentas también fueron suspendidas por YouTube.
Facebook también censuró a Paul y Johnson, así como a Taylor Greene, Jim Jordan (OH) y otros representantes republicanos en el Congreso.
No obstante, Facebook sí registró una instancia de censura contra una congresista demócrata. Según recuerda MRC, la plataforma removió una publicación de la representante Marie Newman (D-IL) en febrero de este año, pero reestableció la publicación y ofreció disculpas luego de que Newman hiciera un tweet quejándose al respecto.
“Representante, esto no debió ocurrir”, tuiteó el Director de Políticas de Facebook, Andy Stone. “Hemos restaurado el contenido y le ofrecemos nuestras sinceras disculpas”.
Recientemente, el Wall Street Journal (WSJ) reveló archivos internos de Facebook que indicaban que la plataforma mantenía una llamada “lista blanca” de figuras poderosas que estaba “protegiendo” de sus típicos procedimientos de censura, especialmente en campañas locales y estatales.
“Si bien el programa incluyó a la mayoría de los funcionarios del gobierno, no incluyó a todos los candidatos a cargos públicos, a veces otorgando efectivamente a los titulares en las elecciones una ventaja sobre los aspirantes”, se lee en el artículo del WSJ.
Sin ir más lejos, el ejemplo más contundente ha sido la censura acordada entre todas las redes sociales e importantes plataformas digitales contra el expresidente Donald Trump mientras seguía en el cargo.
Desde 2020, las Big Tech comenzaron a marcar casi todo lo que Trump publicaba en sus redes sociales con mensajes para su campaña. La persecución fue implacable.
Trump emprendió en julio una guerra legal contra las Big Tech, y demandó a los CEOs de Google, Facebook y Twitter, Pichai Sundararajan, Mark Zuckerberg y Jack Dorsey respectivamente, por las prácticas de censura sistemática en sus plataformas.
