Read in English
El exsecretario de Estado, Mike Pompeo creó un Comité de Acción Política (PAC) llamado “Champion American Values PAC (CAVPAC)”. El excongresista de Kansas dijo al Washington Examiner que el CAVPAC apoyará a los candidatos del GOP en toda la nación en un esfuerzo por recuperar el Congreso en 2022. Mientras Mike Pompeo crea un nuevo PAC, muchos empiezan a preguntarse si está sentando las bases para presentarse a la presidencia en 2024.
El objetivo a corto plazo del recién creado CAVPAC es ayudar, a través de contribuciones financieras, a los compañeros republicanos para las próximas elecciones de mitad de período del 2022. Sin embargo, sería muy ingenuo por parte de cualquiera no considerar el último movimiento de Pompeo como una cuidadosa estrategia destinada a elevar su perfil nacional y establecer una estructura nacional desde la que potencialmente podría lanzar una carrera por la nominación republicana dentro de tres años.
La agenda de Pompeo y su presencia en los medios de comunicación ha dejado muchas pistas que confirmarían esta teoría, además de hablar con el Examiner también concedió una entrevista a Politico destacando las tareas de su nuevo PAC. Aparte de hablar con varios medios de comunicación, el exsecretario de Estado tiene una agenda repleta, ya que tiene previsto intervenir en el retiro de verano de donantes del Comité Nacional republicano, en la cumbre de liderazgo de FAMILY (en Iowa) y en muchas otras apariciones en grupos y organizaciones conservadoras clave.
Aunque no ha restado importancia a su posible candidatura presidencial, actualmente está dedicando todos su potencial al esfuerzo republicano por recuperar el Congreso en las elecciones de mitad de mandato, y ha declarado al Examiner: “No se trata de mi carrera en 2024, ni mucho menos. Se trata de hacer todo (…) para tener éxito en noviembre del año que viene”.
El meteórico ascenso de Mike Pompeo
Pompeo comenzó su carrera política nacional en 2011, cuando fue elegido como representante por el distrito 4 de Kansas. Pompeo, como gran parte del establishment político del Partido republicano, tuvo una relación cambiante con el expresidente Trump, pasando de ser un férreo adversario en 2016 a servir bajo su gabinete durante casi tres años.
En 2016, cuando Trump aún era candidato a las primarias y la elección estaba lejos de terminar, Pompeo apoyó al senador Marco Rubio (R-FL) en su finalmente fallida candidatura a la presidencia, al tiempo que comparó al entonces candidato Trump con el expresidente Obama, diciendo que “hemos pasado siete años y medio con un presidente autoritario que ignoró nuestra Constitución. No necesitamos cuatro años más de eso”.
Aunque muchos criticarán a Pompeo por su cambio de actitud hacia Trump, no es infrecuente que rivales acérrimos en las primarias se conviertan en fuertes aliados políticos una vez pasadas las elecciones. George H.W Bush se convirtió en el vicepresidente de confianza de Reagan incluso después de que ambos se enfrentaran amargamente en las primarias republicanas de 1980 y, más recientemente, el presidente Biden seleccionó como compañera de fórmula a una rival en las primarias que atacó duramente su historial en temas raciales en un debate de las primarias demócratas.
Sin embargo, parece que Trump no guardó ningún rencor personal contra Pompeo una vez que ganó la nominación republicana y la presidencia en 2016 ya que nominó al congresista como director de la CIA en 2017 (cargo en el que estuvo un año) y luego fue secretario de Estado de la administración Trump tras la dimisión de Rex Tillerson en 2017.
Pompeo fue un activo portavoz de la agenda internacional de Estados Unidos durante sus años como secretario de Estado, encabezando los esfuerzos de la Casa Blanca para derrocar al régimen de Maduro en Venezuela, calificando abiertamente (e históricamente) las atrocidades de China contra la población uigur como un “genocidio” y liderando la respuesta a otros temas como Irán, Rusia, entre otros.
Su papel como secretario de Estado le dio la oportunidad de darse a conocer en la discusión nacional, al ser la cara más reconocible de los esfuerzos de la administración Trump en el ámbito internacional. Sin embargo, si Pompeo quiere tener un futuro en la política nacional, es clave que sea conocido más allá de la política internacional y se convierta en una reconocida figura dentro del movimiento conservador.
Los retos de Pompeo para 2024
Suponiendo que Pompeo quiera presentarse a la presidencia en 2024, tendrá que enfrentarse a dos retos clave: convertirse en una poderosa fuerza en la política conservadora nacional y lidiar con la posibilidad de que Trump decida buscar la nominación republicana en el 2024.
Pompeo ya está haciendo todo lo posible para superar el primer reto. El PAC que acaba de crear, más la apretada agenda de viajes que está planeando le dará, con suerte, tanto los titulares como la organización necesaria para ser conocido por todos como un serio aspirante a la nominación republicana.
Sin embargo, Pompeo se enfrenta a una dura competencia para conseguir esto. Otros posibles candidatos como Nikki Haley y Mike Pence ya han hecho movimientos que muchos consideran como preparativos para el 2024. Haley también creó un PAC (Stand for America) y Pence ha estado visitando una serie de estados clave en los últimos meses.
El último pero más importante problema para Pompeo son los planes de su antiguo jefe, Donald Trump, quien sigue siendo muy popular dentro de la base republicana a pesar de su derrota en el 2020 y de los caóticos disturbios del Capitolio del 6 de enero. Si Trump decide presentarse, sería muy improbable que cualquier desafío de Pompeo tuviera éxito, lo que podría condenar las aspiraciones de Pompeo por al menos cuatro años más.
Parece que Pompeo está planeando metódicamente su futuro, queriendo capitalizar su meteórico ascenso para convertirse en un peso pesado nacional en el mundo de la política conservadora y su primer paso es convertirse en una fuerza efectiva para el GOP en 2022.
Sin embargo, esta tarea será difícil. Después de todo, el último exsecretario de Estado que consiguió ganar unas elecciones presidenciales fue James Buchanan en 1856.
Daniel is a Political Science and Economics student from the University of South Florida. He worked as a congressional intern to Rep. Gus Bilirakis (FL-12) from January to May 2020. He also is the head of international analysis at Politiks // Daniel es un estudiante de Cs Políticas y Economía en la Universidad del Sur de la Florida. Trabajo como pasante legislativo para el Representate Gus Bilirakis (FL-12) desde enero hasta mayo del 2020. Daniel también es el jefe de análisis internacional de Politiks.