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Del 2 al 4 de diciembre la Oficina de las Naciones Unidas contra la Drogas y el Delito (ONUD) votará a favor o en contra de las últimas recomendaciones hechas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para modificar la regulación que rige bajo los convenios actuales con respecto al cannabis.
Las recomendaciones fueron originalmente presentadas por la OMS en 2019 y una votación iba a ocurrir en febrero de ese año, pero varias naciones, incluida Estados Unidos, solicitaron plazo para estudiar a fondo la propuesta. La votación se movió para marzo del 2020, pero debido a la pandemia tuvo que ser aplazada nuevamente.
La votación del 2 de diciembre girará alrededor de la disminución en el grado de gravedad que la ONUD actualmente le otorga a las sustancias con tetrahidrocannabinol (THC) y/o cannabidiol (CBD), entre ellos productos farmacéuticos a base de cannabis como el Marinol, Syndrox y Sativex.
Aunque el cannabis contiene más de 100 tipos de cannabinoides, son el THC y el CBD los que destacan por sus efectos y situación jurídica. El THC es el componente psicoactivo del cannabis con propiedades medicinales y el responsable de los efectos psicotrópicos que causa la marihuana. El CBD, en cambio, no es psicoactivo y tiene propiedades antipsicóticas y antinflamatorias sin generar los efectos que causa el THC, haciéndolo uno de los componentes más buscados para usos medicinales.
Entre sus recomendaciones, la OMS pide que todas las formas de THC sean removidas de la categoría IV de la convención de drogas de 1961, la de mayor grado de severidad, y que se ubique la sustancia bajo la categoría I, la menos restrictiva de las clasificaciones para la ONUD.
Aunque todavía no se ha garantizado que la votación favorecerá las recomendaciones de la OMS, en caso de que así sea significaría un gran paso en la despenalización en todo el mundo. Aunque en la mayor parte de Occidente portar marihuana ha dejado de ser considerado un delito mayor, en algunos países los usuarios pueden estar sometidos a multas y sanciones por la mera tenencia.
Naciones donde antes la tenencia de marihuana era castigada con cárcel han cambiado radicalmente sus posturas. Es el caso de Tailandia, donde en su momento la prohibición dio paso a medidas draconianas para reprimir su consumo, pero hoy en día no solo se ha dejado de perseguir el porte y consumo de marihuana, sino que se busca establecer toda una industria médica alrededor del cannabis medicinal.
Otros países como México y Colombia que han sido históricamente el epicentro de la guerra contra las drogas buscan alternativas para el mercado de cannabis medicinal. Recientemente, en Colombia se votó para regular la marihuana recreativa, pero la votación no favoreció la propuesta. Por su parte, en México el Senado aprobó regular el consumo de marihuana y legalizó su porte hasta por 27 gramos.
Un pie de página problemático en la regulación del cannabis
Dentro de la propuesta de la OMS se considera añadir un pie de página a la Convención única sobre estupefacientes de 1961 en cuanto al CBD: «Preparaciones que contienen predominantemente cannabidiol (CBD) y no más de 0. El 2 % de tetrahidrocannabinol delta-9 no están bajo control internacional».
Tanto la representación estadounidense como la europea encuentran problemático este punto que forzaría a las legislaciones a establecer regulación sobre otras sustancias, en vez de asumir que la regulación vigente aplica sobre ellas independientemente si están explícitamente mencionadas o no.
Las autoridades estadounidenses afirmaron que quieren evitar establecer «un precedente de que la CND ahora tiene que comenzar a agregar pie de páginas, lo que desplazaría la presunción de que las cosas no están controladas a menos que se indique explícitamente que están controladas». En otras palabras, los funcionarios estadounidenses ven que en caso de especificar al CBD dentro del actual convenio daría indicio a que hubiera que reglamentar otra serie de sustancias, en vez de asumir que estas ya están reglamentadas bajo los actuales acuerdos.
Aunque el propio Estados Unidos está planteándose la descriminalización de la marihuana a nivel federal, la votación a favor del cambio de regulación vigente en la ONUD todavía no es un hecho. En caso de resultar favorable la votación al concepto de la OMS, esto podría dar inicio a que muchos países se replanteen la regulación que actualmente tienen con respecto al cannabis.
Economist, writer and liberal. With a focus on finance, the war on drugs, history, and geopolitics // Economista, escritor y liberal. Con enfoque en finanzas, guerra contra las drogas, historia y geopolítica