Si la lista de pelis y series menos woke del año resultaba difícil de elaborar por la escasez de estas, este listado de las más woke del 2022 es difícil por su abundancia.
Disney, Netflix y Amazon parecen querer disputarse el cetro de ser los más wokes, a pesar de la evidencia del fracaso del wokeismo entre el público.
Estas son las 5 series y películas que demuestran que el lema “Go Woke, Go Broke” es una realidad.
1) The Rings of Power
The Rings of Power de Amazon Prime Video es uno de los fracasos más estrepitosos del año. No solo se ha quedado fuera de los Golden Globes, sino que es evidente el nerviosismo de Amazon al intentar maquillar su audiencia y crítica, tras haber hecho una apuesta multimillonaria que ha terminado siendo despreciada por todo el mundo.
Amazon insistió desde antes de su estreno en que sería una serie “diversa e inclusiva”, lo cual hacía presagiar su fracaso, ya que no hay nada más diametralmente opuesto a Tolkien que algo woke. Ante las primeras críticas por parte de los fans acérrimos de Tolkien, durísimas, pero merecidas, Amazon se escudó en la socorrida excusa de acusarlos de machistas, racistas y ultraderechistas.
Sin embargo, a medida que pasaban los capítulos, los fans de Tolkien cada vez se mostraban más indignados, el público en general mostraba su indiferencia, y el público woke al que querían apelar y satisfacer ni siquiera la veía. Probablemente andarían muy ocupados cambiando sus pronombres o manifestándose por múltiples causas.
Una protagonista femenina fuerte —¡qué original!—, inclusión forzada en todos los personajes conocidos y un misterioso nuevo personaje que era un hombre blanco y heterosexual. Como era de esperar, que el único personaje inventado para esta serie tuviera estas características, era sinónimo inequívoco de que sería el villano, por lo tanto, la supuesta gran revelación del final de que Halbrand en realidad era Sauron no sorprendió absolutamente a nadie.
Al igual que no sorprendió a nadie que una adaptación woke de Tolkien se convirtiera en el fracaso que terminó siendo. Para la segunda temporada Amazon no parece aprender y ya ha anunciado que todos sus capítulos estarán dirigidos por mujeres. De la historia, la trama, los personajes o la mitología no se han pronunciado aún. ¿Qué puede salir mal?
2) She-Hulk
Marvel sigue en pleno proceso de feminización de su universo de superhéroes, y She-Hulk es quizás el mejor ejemplo de por qué esta decisión estratégica es una locura. La ideología woke no soporta personajes masculinos fuertes y está empeñada en que cosas que siempre fueron más bien de chicos, como los cómics, el fútbol o los videojuegos, ahora tengan que ser no solo también de chicas, sino exclusivamente para chicas… u hombres deconstruidos.
Iron Man ahora será una adolescente afroamericana llamada Iron Heart, la serie de Loki se centra en su versión femenina del multiverso, Hawkeye entrega el testigo a su nueva versión adolescente femenina, y así sucesivamente.
En la serie She-Hulk no solo se produce esta inversión de género del protagonista, sino que además lo hace humillando al personaje de Hulk —y por extensión a todos los hombres— convirtiendo la serie en un insoportable alegato feminista radical que parece una mezcla entre Ally McBeal y Sex and the City.
Para los anales del wokeismo quedará la escena en la que She-Hulk le asegura a Hulk que ella es mejor que él controlando su ira porque como mujer siempre ha tenido que soportar piropos por la calle, u hombres que le hagan mansplaining en su trabajo.
3) Willow
Con esta serie Disney profundiza en su sistemático y metódico proceso de demolición de todo clásico que pueda tener una lectura alejada de los postulados woke. En esta revolución cultural de reescritura de las historias clásicas, Disney demuestra su obsesión alocada con esto al intentar hacer aún más woke a un clásico de los 80 que ya de por sí tenía un mensaje feminista.
En la nueva serie de Willow no hay ni rastro de Madmartigan, ni de ningún personaje masculino que no esté deconstruido, y su protagonista es una mujer fuerte, víctima del heteropatriarcado y, por supuesto, lesbiana. A los 20 minutos del primer capítulo ya te das cuenta de que la serie ha sido escrita tachando uno a uno los clichés del formulario woke en el que parecen basarse todas las series y películas actuales.
4) Pinocchio
La versión de Disney de Pinocchio que mezcla animación con imagen real protagonizada por Tom Hanks es una de las adaptaciones más lamentables no solo del año, sino de los últimos tiempos.
Esta película, más que una actualización del adorado clásico infantil aprovechando la tecnología actual, parece una refutación, punto por punto, de los valores conservadores y tradicionales que transmitía la original.
Es como si Disney hubiese visto la conferencia de Jordan Peterson sobre la psicología detrás de Pinocchio y hubiera decidido hacer una película para llevarle la contraria y que se adaptara a los postulados más woke y desquiciados de la narrativa progresista moderna.
Para mayor desgracia de Disney, Guillermo del Toro ha estrenado este año una versión de Pinocchio que deja en ridículo a este remake del niño de madera. Guillermo del Toro ha demostrado que se puede volver a contar una historia de forma original e innovadora sin tener que recurrir a convertirla en un refrito woke.
5) Dahmer
La serie de Netflix sobre el asesino en serie Jeffrey Dahmer no es una mala serie. Está bien actuada, bien dirigida y bien producida. Esto, y el morbo inherente a la historia real, explican su éxito de audiencia.
Sin embargo, las flagrantes mentiras y la descarada manipulación de los hechos para adaptarla a la narrativa woke la convierten en una de las series más insultantes del año.
En Dahmer se retuerce tanto una historia real de hace 30 años para utilizarla políticamente a favor de cuestiones actuales como Defund the Police, Black Lives Matter o el movimiento LGBTQ que hace que su visionado sea insoportable.
Cualquiera que conozca la historia real detrás de los crímenes de Dahmer, se dará cuenta de la manipulación torticera que lleva a cabo Netflix, y le impedirá disfrutar de una serie que, por otro lado, era una oportunidad magnífica para profundizar en estos lamentables sucesos.
Quien no conozca esos detalles, en este artículo podrán comprobar los descarados cambios que hizo Netflix para meternos con cuchara su ideología woke.
Ignacio Manuel García Medina, Business Management teacher. Artist and lecturer specialized in Popular Culture for various platforms. Presenter of the program "Pop Libertario" for the Juan de Mariana Institute. Lives in the Canary Islands, Spain // Ignacio M. García Medina es profesor de Gestión de Empresas. Es miembro del Instituto Juan de Mariana y conferenciante especializado en Cultura Popular e ideas de la Libertad.
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