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El banderazo de partida para una campaña internacional en favor de la legalización de las drogas la dio Gustavo Petro con su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas, en el cual manifestó que la lucha contra las drogas estaba perdida y que debían buscarse las vías para legalizarla.
Los primeros en apoyar la iniciativa del colombiano fueron los integrantes de la Internacional Progresista, seguidos del líder cocalero boliviano, Evo Morales, y del diputado socialista español, Gerardo Pisarello, lo cual reseñé en este mismo espacio a finales del mes pasado.
El 6 de octubre se produjo un cambio de fase cuando el presidente Biden decretó un indulto general a quienes estuviesen presos por posesión de cannabis y solicitó al Departamento de Salud y Servicios Humanos, así como al fiscal general de Estados Unidos, que revisen “rápidamente” cómo se clasifica la marihuana en la ley federal.
Una vez más, quienes reaccionaron primero fueron los de la Internacional Progresista, cuyo fundador, el senador Bernie Sanders, manifestó su complacencia por la medida del presidente y compañero de partido, Joe Biden, expresando: “tenemos un largo camino que recorrer. Sucede que creo que la marihuana debería ser legal en todo el país”. No es casual que Gustavo Petro esté en el Consejo Directivo de la Internacional Progresista.
Por su parte, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, también de tendencia socialista, aplaudió la decisión de Biden y declaró que “Es absurdo que la marihuana de California sea legal y la del Cauca, criminal. Llegó la hora de avanzar juntos en la misma dirección lógica”.
El embajador de Petro en Venezuela, Armando Benedetti, no se quedó atrás, y escribió este trino: “¡O se prohíbe el alcohol o no se prohíbe nada! (…) Está científicamente probado que es más perjudicial el licor que muchas de las drogas. En el sistema nervioso, en la academia, en las relaciones interpersonales, etc. Entonces, ¡o se prohíbe todo o nada! Esto es para los puritanos”. Llama la atención que el enviado de Petro mantenga esa posición justo en la sede de operaciones del Cartel de los Soles.
No se trata solo de opiniones, puesto que ya la propuesta de Petro tiene visos de convertirse en ley, al menos en Colombia. El pasado 21 de septiembre, justo después del discurso de Petro en la ONU, 25 congresistas colombianos de diferentes partidos políticos escribieron una carta pública, proponiendo legalizar la producción y consumo de cannabis.
La misiva fue firmada, entre otros, por Humberto de la Calle, Daniel Carvalho, Gustavo Bolívar, David Racero, Roy Barreras, David Luna, Ariel Ávila, Fabián Díaz Plata, María José y María del Mar Pizarro, Duvalier Sánchez, Katherine Miranda, Cathy Juvinao, Juan Sebastián Gómez, Wadith Manzur, Jorge Tamayo, María Fernanda Carrascal, Alirio Uribe, Heráclito Landinez, Luis Alberto Albán, Santiago Osorio, Diógenes Quintero y Andrés Calle.
La legalización de las drogas forma parte de la guerra cultural del progresismo en contra de la civilización occidental, puesto que una juventud drogada y degradada es mucho más fácil de manipular.
Nitu Pérez Osuna es una reconocida periodista venezolana en el exilio. Por muchos años fue una de las caras principales del canal de noticias más importante de su país, hasta que fue vendido a aliados de la dictadura chavista, por lo que fue despedida. Nitu Pérez Osuna es perseguida política de Nicolás Maduro y se ha dedicado a denunciar, no solo a la dictadura de su país, sino a los regímenes socialistas de todo el continente.