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Los republicanos deben rechazar la etiqueta de ‘Hitler’ a Biden

Los republicanos deben rechazar la etiqueta de 'Hitler' a Biden

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Es justo decir que después del impresionante discurso de Joe Biden en el Independence Hall el jueves por la noche, las emociones estaban a flor de piel. Hablando en un contexto amenazante en negro y rojo, Biden efectivamente le declaró la guerra al presidente Donald Trump y a sus partidarios, acusándolos de amenazar los fundamentos “de nuestra república”.

Naturalmente, los republicanos reaccionaron con una protesta. El jefe de Daily Wire, Ben Shapiro, a menudo considerado la voz conservadora de la racionalidad, lo describió como “el discurso más demagógico, escandaloso y divisivo que he visto de un presidente americano”, y agregó que Biden había declarado “esencialmente a todos los que se le oponen a él y a su agenda como enemigos de la república”. Mientras tanto, el líder de la minoría de la Cámara, Kevin McCarthy, acusó a Biden de “calumniar a decenas de millones de americanos como fascistas“.

Sin embargo, muchos fueron más allá de este nivel de retroceso. Docenas de activistas conservadores, periodistas y comentaristas calificaron el discurso como hitleriano. Mientras tanto, el hashtag #pedohitler se convirtió en una de las principales tendencias de Twitter. “Joe Biden es Hitler”, escribió la congresista de Georgia Marjorie Taylor Greene. El exdesignado presidencial Nick Adams fue un paso más allá, argumentando: “No creo que Hitler haya dicho nada sobre los judíos que fuera tan malvado como Biden dijo sobre mí, un partidario de Trump, anoche”.

Invocar a Adolf Hitler y la Alemania nazi se conoce como Reductio ad Hitlerum, en latín, “Reducción a Hitler”, una de las formas más comunes de falacia de asociación. Es una táctica utilizada por personas de todos los credos y colores, aunque rara vez logra cambiar corazones y mentes. Un ejemplo obvio de esto proviene directamente del movimiento progresista moderno, que durante la campaña presidencial de 2016 calumnió continuamente a Donald Trump de ser la próxima venida de Hitler.

Además de ser descaradamente falso, la comparación degrada a las víctimas del Holocausto y de la Segunda Guerra Mundial. Alrededor de seis millones de judíos y otras poblaciones objetivo fueron asesinados como parte del programa nazi de limpieza étnica. No importa cuán maligno se pueda considerar a Biden, un escenario similar que tenga lugar en su dirección sigue siendo inimaginable.

La Alemania nazi era más que simplemente malvada. Fue subversiva, depravada y pornográfica. Llame a Joe Biden un aspirante a tirano por todos los medios, pero compararlo con el hombre que creó una máquina de muerte industrializada es una colina en la que ningún conservador respetable debería desear morir.

Ben Kew is English Editor of El American. He studied politics and modern languages at the University of Bristol where he developed a passion for the Americas and anti-communist movements. He previously worked as a national security correspondent for Breitbart News. He has also written for The Spectator, Spiked, PanAm Post, and The Independent

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Ben Kew es editor en inglés de El American. Estudió política y lenguas modernas en la Universidad de Bristol, donde desarrolló una pasión por las Américas y los movimientos anticomunistas. Anteriormente trabajó como corresponsal de seguridad nacional para Breitbart News. También ha escrito para The Spectator, Spiked, PanAm Post y The Independent.

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