fbpx
Saltar al contenido

Las ruedas de prensa de Biden son un síntoma de que Estados Unidos va por mal camino

Las «rueda de prensa» de Biden son un síntoma de que Estados Unidos va por mal camino

Cada presidente tiene una serie de imágenes icónicas que representan, de alguna u otra forma, los key points de su mandato. Sin irnos muy lejos, el expresidente Donald Trump tiene varias imágenes históricas, como los aplausos de la demócrata Nancy Pelosi durante su discurso del Estado de la Unión en febrero de 2019, o aquella imagen en la cumbre del G7 en Canadá donde se ve al mandatario de brazos cruzados, sentado y con un rostro burlón, mientras los otros líderes lo miraban desafiantemente luego de que Estados Unidos impusiera aranceles a la importación de acero y aluminio a la Unión Europea, México y Canadá.

Joe Biden no se quedará atrás, de hecho, ya va dejando fotos que pasarán a la historia. Hasta ahora, en estos ocho meses de mandato, hay varias tomas trascendentales, pero hay una imagen que, de forma particular, se viene repitiendo sistemáticamente al punto que empieza a ser una marca registrada del presidente demócrata: las huidas de las «ruedas de prensa». Es una imagen dramática, que muestra al líder del llamado “mundo libre” alejarse de las preguntas incómodas que puedan surgir de los periodistas.

No hay que confundirse, estas «ruedas de prensa» no son más que anuncios institucionales. Los medios, en un principio, se prestaron para el circo mediático, pues iniciaron con preguntas elegidas a dedo por el equipo de comunicaciones de la Casa Blanca y con periodistas poco hostiles a la administración demócrata. Luego ya fue el colmo, pues Biden, como presidente, en diferentes momentos coincidió con preguntas de la prensa y simplemente las ignoró o las contestó con pedantería en varias ocasiones. De más está decir lo que hubiese pasado si el personaje no era Biden, sino DeSantis o Trump, la mainstream media liberal, no lo hubiera perdonado.

Uno supondría que, en el país más libre del mundo, esta situación sería temporal. Que con el paso del tiempo Biden terminaría abriéndose y abrazando a la prensa, sobre todo a los medios liberales que durante meses estuvieron encantados con el presidente, pero nos equivocamos, ocurrió exactamente lo contrario.

Ya no solo no existen preguntas hostiles de medios conservadores, directamente no hay preguntas. Luego de la estruendosa caída de Kabul en manos de los talibanes, que dejó desnuda no solo a la administración Biden sino también a todos los servicios de Inteligencia, el presidente asistió a diferentes «ruedas de prensa» donde solo dio partes oficiales y luego salió huyendo de la sala.

Biden, sin titubear, no solo le dio la espalda a los periodistas, sino a todos los ciudadanos americanos que siguen sin respuestas a las tantas incógnitas que surgen en torno al nefasto retiro de tropas en Afganistán.

Las «rueda de prensa» de Biden son un síntoma de que Estados Unidos va por mal camino
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pronuncia un discurso sobre Afganistán y la reunión especial del G7 al respecto, en el Salón Roosevelt de la Casa Blanca en Washington, DC, Estados Unidos, el 24 de agosto de 2021. (EFE)

Habrá que acostumbrarse a estas mal llamadas «ruedas de prensa», pues parece que llegaron para quedarse. Las mismas reflejan que Estados Unidos va por un mal camino, alejándose cada vez más de los valores fundamentales que forjaron a una gran nación. Por más paradójico y triste que suene, cuando Vladimir Putin asistió a la cumbre con Biden, el propio líder ruso atendió a la prensa occidental, respondiendo las difíciles preguntas que hicieron los medios. Podían gustar más o menos las respuestas, pero las brindó sin quejarse.

Sin embargo, no solo fue Putin, hasta los propios terroristas talibanes (los mismos que representan un potencial peligro para Occidente) atienden a los medios de prensa occidentales e intentan responder con sorna las preguntas de los periodistas.

De hecho, sorprendió tanto este hecho que la BBC le dedicó un breve perfil al «misterioso portavoz» talibán llamado Zabihullah Mujahid.

En cambio, el líder del mundo libre rehúye de la prensa, no acepta las críticas válidas y decide unilateralmente no dar explicaciones a la gente. Es un síntoma no solo de la decadencia de Estados Unidos y el mundo libre, sino también de los extraños tiempos que vivimos.

Emmanuel Alejandro Rondón is a journalist at El American specializing in the areas of American politics and media analysis // Emmanuel Alejandro Rondón es periodista de El American especializado en las áreas de política americana y análisis de medios de comunicación.

Contacto: [email protected]

Deja una respuesta

Total
0
Share