fbpx
Saltar al contenido

Sergio Fajardo: el candidato que dinamitó su camino a la presidencia de Colombia

Sergio Fajardo

En 1999, Sergio Fajardo Valderrama, matemático y profesor universitario, decidió abandonar la vida académica y con algunos amigos procedentes también del medio universitario fundó un movimiento llamado Compromiso Ciudadano, con el cual participó, al año siguiente, en las elecciones para alcalde de Medellín, su ciudad natal. Aunque en esa oportunidad no alcanzó su propósito, inició una larga carrera política que lo tiene hoy como uno de los ocho colombianos que aspiran a la presidencia de su país en las elecciones del próximo 29 de mayo.

En 2003, Fajardo logró su propósito de ser elegido alcalde de Medellín, cargo que ejerció entre 2004 y 2008. En 2010 se lanzó a la política nacional como fórmula vicepresidencial de Antanas Mockus, pero resultaron derrotados por Juan Manuel Santos.

En 2011, Fajardo retornó a la política regional y fue elegido gobernador de Antioquia entre 2012 y 2015. En las elecciones presidenciales de 2018, Fajardo alcanzó en primera vuelta 4,602,916 votos, que no fueron suficientes para pasar al ballotage que se disputaron Gustavo Petro e Iván Duque. 

Para las elecciones de 2022, Fajardo está a la cabeza de una alianza de partidos y movimientos de centro -izquierda, en la que participan un partido vinculado al Foro de São Paulo y varios exfuncionarios –ministros– del gobierno de Juan Manuel Santos.

A diferencia de lo ocurrido en las elecciones de 2018, en las que Fajardo pudo haber resultado elegido presidente de haber pasado a segunda vuelta; en la de 2022 su favoritismo, que empezó muy alto, se fue desplomando a medida que avanzaba la campaña. A la fecha está en 7%, según las principales firmas encuestadoras

Las propuestas de Sergio Fajardo

Hay algo curioso en la situación actual de Sergio Fajardo que pone en evidencia la poca relevancia que tienen las propuestas programáticas en las preferencias de los electores. En 2018, su propuesta política se limitaba a la condena de la corrupción y a consideraciones generales sobre la importancia de la educación. En 2022 Fajardo llega con una propuesta de corte socialdemócrata amplia, detallada y bien estructurada, sin embargo, no logra capturar intención de voto.

Fajardo ha propuesto una reforma tributaria con la que busca recaudar $8,250 millones adicionales para financiar su programa asistencialista que contempla, entre otras cosas, una renta vitalicia de $125 mensuales a tres millones de personas, lo que tendría un costo anual de $4,500 millones. En 2021, el recaudo de impuestos nacionales fue de $43,500 millones. La reforma de Fajardo supondría un aumento de 19%. 

Fiel a su trayectoria, Fajardo insiste en la bandera anticorrupción y propone la creación de una Agencia Nacional de Prevención y Lucha contra la Corrupción. Siguiendo la tendencia de la izquierda de acabar con la noción de ciudadano y segmentar a la población en grupos minoritarios de interés, Fajardo tiene ofertas para cada uno de ellos.

Una propuesta ampliamente socialdemócrata no han capturado la atención del electorado colombiano. (EFE)
Una propuesta ampliamente socialdemócrata no han capturado la atención del electorado colombiano. (EFE)

A las mujeres les promete un Ministerio de la Mujer; al “pueblo Negro, Afrocolombiano, Raizal y Palenquero” una dirección reforzada para atender sus asuntos en el Ministerio del Interior; a los pueblos indígenas les ofrece más autonomía, más subsidios y transferencias; también hay propuestas especificas para la “comunidad LGTB+”, los discapacitados, las personas mayores, los jóvenes, los deportistas y –cómo– los “trabajadores de la cultura”.

Fajardo promete un retorno al proteccionismo económico, habla de “protección inteligente” para la industria y la agricultura. Además, busca realizar una gran transformación productiva “en la cual la agricultura, la industria y los servicios, en especial los de alto contenido tecnológico, tendrán un papel prioritario”. Esa transformación productiva sería fundamental para “dejar atrás la dependencia del petróleo y el carbón” y pasar a una estructura exportadora más diversificada. 

En salud, Fajardo mantendrá el sistema actual de separación entre el aseguramiento (EPS) y la atención (IPS), pero buscando una mayor integración entre los actores del sistema y las autoridades para desarrollar lo que denomina “modelo territorial en salud”.

En pensiones, sin abandonar el sistema de ahorro individual con solidaridad, ofrece reforzar el sistema de prima media haciendo obligatoria la cotización de ingresos de hasta cuatro salarios mínimos. 

En servicios públicos domiciliarios promete acciones para aumentar el porcentaje de aguas servidas, elevar la cobertura de acueducto y duplicar la participación de las fuentes no convencionales en la matriz de generación eléctrica. Promete el trámite de una Ley para consagrar el derecho al agua. 

Uno de los aspectos más interesantes del programa de Fajardo es su propuesta de impulsar la creación de cinco centros de investigación de ciencia y tecnología para el agro, la industria manufacturera y los servicios, las energías renovables y el cambio climático, la salud y la bioeconomía. 

La patética campaña de Fajardo

En 2022, Sergio Fajardo logró una coalición partidista más amplia que la de 2018 y llegó con una propuesta programática más completa y mejor estructurada. Sin embargo, muy probablemente el resultado de la votación del 29 de mayo puede marcar el fin de su vida política.

La campaña de Fajardo se ha caracterizado por su patetismo. No solo no ha logrado destacar como lo hizo en las elecciones del 2018, sino que además ha intentado desesperadamente convencer a los votantes de Federico Gutiérrez para que voten por él, afirmando que tiene mejores opciones para derrotar a Petro que el candidato de la derecha, afirmación que ha jugado en su contra.

Sergio Fajardo intentó fallidamente arrebatarle votos a su rival Federico Gutierrez para llegar a segunda vuelta. (EFE)
Sergio Fajardo intentó fallidamente arrebatarle votos a su rival Federico Gutierrez para llegar a segunda vuelta. (EFE)

Si obtiene el porcentaje de la votación que indican las más recientes encuestas (7%), alcanzaría un millón y medio de votos, lo que le daría algún margen de negociación en la segunda vuelta. 

La trayectoria política de Fajardo que lo llevó a la situación actual es bien curiosa. Empezó siendo partidario de Álvaro Uribe Vélez cuando este era gobernador de Antioquia. Llegó a la alcaldía de Medellín con el apoyo del establecimiento económico de la ciudad.

Se alió con Antanas Mockus y se enfrentó a Santos y Petro en las elecciones presidenciales de 2010, blandiendo todavía la bandera de la antipolítica. En 2018 fue candidato de un sector de la izquierda opuesto a Petro y en 2022 terminó como candidato de una coalición de izquierda con exfuncionarios de los gobiernos de Juan Manuel Santos.

Economist, writer and liberal. With a focus on finance, the war on drugs, history, and geopolitics // Economista, escritor y liberal. Con enfoque en finanzas, guerra contra las drogas, historia y geopolítica

Deja una respuesta

Total
0
Share