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Estados Unidos está cansado de Silicon Valley. Ya sea por el comportamiento anticompetitivo de Apple, la destrucción por parte de Amazon de las empresas pequeñas e independientes, y la implacable censura de empresas como Google, Facebook y Twitter, millones de americanos buscan ahora cualquier tipo de alternativa a nuestros señores de las Big Tech.
Durante años los conservadores y los libertarios han estado trabajando en proyectos destinados a proporcionar estas alternativas, que van desde las redes sociales hasta las tecnologías de cadena de bloques destinadas a sustituir la moneda fiduciaria. Aquí vamos a echar un vistazo a algunos de los más destacados de estos desarrollos.
Plataformas de redes sociales
Hay una serie de plataformas de medios sociales construidas como alternativas de libertad de expresión a Facebook y Twitter. La primera de ellas es Gab, una plataforma con un alto nivel de funcionalidad pero con fama de albergar contenidos más extremistas. No obstante, cuenta con más de cuatro millones de usuarios, mientras que sus creadores han desarrollado otros productos como Dissenter, una herramienta que permite a los usuarios comentar cualquier página web mediante un foro de terceros.
También está Parler, que se fundó como una alternativa más creíble y mainstream a Gab. Tras la suspensión de Donald Trump en Twitter, la plataforma comenzó a explotar, aunque este impulso se vio tristemente frenado en seco cuando Amazon decidió desconectarla retirando el acceso a sus servidores.
Más recientemente, el exasesor de Trump, Jason Miller, fundó Gettr, una plataforma que también promete no censurar nunca a sus usuarios y que afirma ser la empresa de redes sociales de más rápido crecimiento del mundo.
Privacidad, seguridad y ecosistemas descentralizados
Clear United, una empresa tecnológica fundada por el empresario de Utah Michael Proper, planea construir todo un ecosistema tecnológico descentralizado capaz de rivalizar con Google. Este ecosistema ofrecerá muchos de los mismos productos, como dispositivos celulares, navegadores, correo electrónico, mensajería instantánea y muchos otros, pero todo ello con la promesa de total privacidad y seguridad.
Entre los productos que ofrece esta empresa se encuentra el Freedom Phone, un dispositivo de privacidad y anticensura diseñado por el millonario de Bitcoin Erik Finman, de 23 años. El dispositivo ha recibido el apoyo de personas como Candace Owens, Dinesh D’Souza y muchas otras figuras políticas importantes.
Mientras tanto, alternativas de navegación establecidas, como el motor de búsqueda DuckDuckGo y el navegador web Brave, también ofrecen a la gente la oportunidad de romper con Google y proteger sus datos cuando navegan por la web.
Compartir videos
Mientras YouTube se convierte en otro foco de censura, la plataforma alternativa para compartir videos “Rumble” ha experimentado un rápido crecimiento desde julio de 2020, pasando de 1,6 millones de usuarios mensuales a 31,9 millones a finales del primer trimestre de 2021. Ha recibido el respaldo de personas como el fundador de PayPal, Peter Thiel, y el destacado capitalista de riesgo J.D. Vance.
Aunque la plataforma es utilizada principalmente por conservadores, incluido el expresidente Donald Trump, también ha anunciado asociaciones con figuras de todo el espectro político, como la exrepresentante y candidata presidencial demócrata, Tulsi Gabbard, y el periodista de izquierdas Glenn Greenwald.
Los creadores pueden monetizar sus vídeos, mientras que los usuarios pueden ganar un premio diario en metálico obteniendo tickets al ver los videos y dar su opinión. Cuantos más tickets tenga un usuario, más posibilidades tendrá de ganar el premio diario.
Recaudación de fondos
Las plataformas de recaudación de fondos, como GoFundMe y Patreon, son conocidas por prohibir el acceso a sus plataformas cuando no les gusta para qué se recauda el dinero. Patreon ha vetado a numerosos creadores conservadores de su plataforma, mientras que GoFundMe ha cerrado proyectos de recaudación de fondos que desaprueban, incluyendo un esfuerzo para recaudar dinero para el recientemente absuelto tirador de Kenosha, Kyle Rittenhouse, en el período previo a su juicio.
El sitio de crowdfunding de creadores Locals, fundado por el periodista Dave Rubin, ha recaudado millones de inversión desde su fundación a principios de este año. Entre los usuarios más destacados de la plataforma se encuentran el artista Scott Adams, el comentarista político Paul Joseph Watson, el periodista de investigación Andy Ngo y el cómico y presentador de Fox News Greg Gutfeld. El mes pasado, la empresa anunció que había sido adquirida por Rumble.
GiveSendGo, una plataforma cristiana de recaudación de fondos de rápido crecimiento, también ha recaudado importantes sumas para personas como el teniente William Kelly, que perdió su trabajo por donar 25 dólares al fondo de defensa de Rittenhouse. Otra campaña consiste en recaudar dinero para contratar abogados que desafíen los mandatos de máscara impuestos por la Corporación Escolar de LaPorte, en Indiana.
Criptomonedas
Cada día es más fácil implementar los beneficios de la tecnología blockchain, ya que los comerciantes facilitan el envío y la recepción de pagos con diferentes criptodivisas. Importantes empresas y procesadores de pagos, como Tesla, PayPal, CashApp, Venmo y Microsoft, han comenzado a aceptar pagos en varias monedas, mientras que las perspectivas continuamente alcistas del precio de los criptoactivos apuntan a un futuro brillante para ellas.
Muchas grandes mentes e innovadores ya han creado la tecnología que nos proporcionará a todos libertad digital; ahora nos toca a nosotros apoyarlos y ayudar a construir un mundo centrado en ella.
Ben Kew is English Editor of El American. He studied politics and modern languages at the University of Bristol where he developed a passion for the Americas and anti-communist movements. He previously worked as a national security correspondent for Breitbart News. He has also written for The Spectator, Spiked, PanAm Post, and The Independent
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Ben Kew es editor en inglés de El American. Estudió política y lenguas modernas en la Universidad de Bristol, donde desarrolló una pasión por las Américas y los movimientos anticomunistas. Anteriormente trabajó como corresponsal de seguridad nacional para Breitbart News. También ha escrito para The Spectator, Spiked, PanAm Post y The Independent.