Seguro recuerdas que, de pequeño, cuando estabas en el colegio, siempre había un compañero que tomaba las decisiones sobre qué jugarían durante los recesos y también planteaba las estrategias que seguirían. Puede que ese compañero permitiera que cada niño del grupo diera su opinión sobre qué jugar o quizá su idea resultaba tan genial que todos, incluyéndote, aceptaban.
Quizás el niño eras tú y ahora estás recordando cómo todos tus amigos prestaban atención a tus sugerencias de juegos. Independientemente de ello, tú o tu compañero mostraron dos aspectos importantes de algo que te explicaremos con lujo de detalles en este artículo: capacidad de liderazgo.
Te garantizamos que, una vez leas este artículo, entenderás no solo por qué tus estrategias (o las de tus compañeros) funcionaban, sino cómo es que hoy desarrollar las habilidades para liderar es una de las mayores fortalezas que se pueden tener en el mundo profesional. ¡Agarra lápiz y papel!
El liderazgo y sus características principales
El liderazgo puedes entenderlo como la capacidad y habilidad de un individuo de afectar e influenciar el comportamiento de un grupo de personas, con el propósito de alcanzar objetivos que se han trazado. Esta influencia suele tener una connotación positiva e implica resultados que traen algún tipo de bienestar para quienes la ejercen y siguen.
Desde el punto organizacional, el liderazgo implica ser una persona con capacidad para trabajar en equipo, acorde a la visión y objetivos de la organización. Con ello, se permite que cada miembro desarrolle sus máximos potenciales en el camino, de forma que se cumplan las metas de la forma más eficiente.
El líder, que es quien ejerce el liderazgo, debe conocer las debilidades y fortalezas de su organización y, en función de estas, analizar qué áreas deben desarrollarse con prioridad. En ese sentido, el buen líder reconoce que siempre hay espacio para mejorar.
Debes saber que no existe una sola forma de ser un líder. Al contrario, existen diferentes estilos de liderazgo, y cada uno se centra en habilidades específicas.
Un estilo no es mejor que otro, simplemente tienen características que hacen que una persona desarrolle su propio estilo de liderazgo de una manera más acorde con su personalidad, y de acuerdo con las necesidades del entorno en el que se desarrolla profesionalmente.
Por ejemplo, existen personas que desarrollan una fuerte inteligencia emocional y, con ello, la habilidad para ser empáticos, buenos oyentes y capaces de crear armonía entre los grupos de trabajo.
Si bien todos estos son elementos de un buen liderazgo, hay otros estilos que se enfocan en la obtención de resultados, y la eficiencia con la que se alcanzan, más que en las personas. Asimismo, existen muchos tipos de liderazgo empresarial.
Los estilos de liderazgo también son dependientes de las áreas en las que se desarrollan. Existen tipos de líder con un enfoque político, con enfoque social o artístico, también los hay en el área científica, deportiva y financiera.
Como podrás darte cuenta, cada área exige conocimientos y destrezas específicas, más allá de los fundamentos de liderazgo que tienen en común y el dominio de aspectos de cultura general.
Sin encerrarnos aún en estilos y enfoques, algunas de las características más importantes que debe tener un líder son las siguientes:
- Tener conciencia de sí mismo, de sus fortalezas y debilidades, lo que permite estar en constante desarrollo profesional y renovar así su capacidad de liderazgo.
- Habilidad para delegar tareas y comunicar de manera asertiva y clara cómo deben ser hechas, así como los propósitos de su realización.
- Se adaptan a los cambios de su entorno y toman decisiones estratégicas que vayan en consonancia.
- Están abiertos a escuchar nuevas ideas y perspectivas para la resolución de problemas. Entienden que existe más de una forma correcta de hacer las cosas.
8 tipos de liderazgo
Ahora que sabes que existen diversos tipos o estilos de liderazgo, es necesario que comprendas en qué se enfoca cada uno y cuáles son sus ventajas y desventajas. A continuación, te presentamos los ocho principales tipos de liderazgo:
Liderazgo autocrático
Este tipo de liderazgo se caracteriza por ser unidireccional y centralizado en la figura del líder, pues las decisiones importantes y finales las toma él, y este espera un total y absoluto cumplimiento por parte de su equipo de trabajo o de sus empleados. En ese sentido, no hay participación ni intervención de parte de los subordinados, pues las órdenes son directas, explícitas e irrevocables.
Ventajas
Puede ser eficiente en ambientes laborales que requieran una alta efectividad y rapidez en la consecución de sus propósitos. Así, asegura las metas de productividad planificadas a corto y largo plazo. Es común en organizaciones militares y otros donde se requieran altos estándares de seguridad, como las de vigilancia.
Desventajas
Puede desarrollar conflictos y tensiones con los empleados, pues la opinión y participación de estos no es valorada. En ese sentido, existe la posibilidad de que las decisiones que toma el líder autocrático, al ser incuestionables y absolutas, vayan en contra del sentir y del pensar de los subordinados. Otra consecuencia de esto es el bajo sentimiento de pertenencia y compromiso en el ambiente de trabajo.
Un ejemplo de líder autoritario es Martha Stewart, una de las empresarias más exitosas en la historia. Construyó su empresa a partir de decisiones estrictamente personales y una vigilancia cercana a sus empleados, buscando siempre la perfección en estos.
Liderazgo democrático
A diferencia del liderazgo autocrático, este liderazgo sí toma en cuenta la opinión del resto del equipo y fomenta la toma de decisiones. Por eso también se le conoce como liderazgo participativo.
Aunque la decisión final queda en manos del líder, este es capaz de crear un clima laboral donde cada miembro siente un fuerte compromiso y responsabilidad hacia con organización, pues sabe que sus ideas son valiosas y pueden ser tomadas en cuenta.
Ventajas
Hay una buena comunicación entre el líder y el empleado, y entre el líder y el ambiente externo. Esto es vital para que el ritmo de trabajo fluya acorde a lo planeado.
Asimismo, este estilo permite que cada trabajador desarrolle un fuerte sentido de identidad con la cultura organizacional y siempre esté motivado a dar lo mejor de sí.
Desventajas
Debido a que el consenso es el aspecto más importante en este liderazgo, su mayor desventaja es justamente el tiempo que puede tomar concertar todas las opiniones y que estas permitan tomar una decisión al líder. Esta lentitud en el proceso puede ver empañado el desempeño de la organización y el cumplimiento de sus objetivos en el tiempo planificado.
Como ejemplo de líder democrático está Ronald Reagan, expresidente de Estados Unidos, caracterizado por su ardua y efectiva labor comunicacional que le permitió una alta valoración entre los votantes americanos.
Liderazgo laissez-faire
En este estilo de liderazgo, la delegación de tareas, así como la exigencia y la observación constante de parte del líder es casi inexistente.
Se nombra laissez-faire, ya que esta frase se traduce al español como «dejen hacer, dejen pasar», y es justamente esta la filosofía que los líderes de este estilo aplican.
A saber: no existe la necesidad de una supervisión constante del equipo de trabajo al considerar que estos tienen la experiencia y competencia para cumplir eficientemente con sus obligaciones.
Ventajas
Una de las ventajas es la confianza y autonomía que se le otorga al empleado. Esto, a su vez, genera un clima laboral sin presiones ni tensiones innecesarias, lo que beneficia aún más la productividad de los trabajadores.
Desventajas
Resulta en desventaja cuando hay empleados que, si bien pueden cumplir con sus obligaciones, no tienen la habilidad para cumplir con planes a corto plazo, son lentos en la ejecución de las tareas o trabajan mejor bajo vigilancia y presión.
Warren Buffett, uno de los inversionistas más exitosos de USA, es un buen ejemplo de este estilo de liderazgo. Parte de su éxito se debe a la libertad que daba a sus empleados.
Liderazgo visionario
El líder de este estilo conoce a fondo cuáles son los objetivos de la empresa y sabe qué, cómo y cuándo va a ejecutar las tareas necesarias para cumplir con la visión de la organización. Tienen un fuerte sentido de propósito que son capaces de transmitir a su grupo de trabajo. Además, son excelentes para ingeniar soluciones ante problemas novedosos. Harán lo que sea para triunfar.
Ventajas
Su principal ventaja es un equipo de trabajo eficiente y ambicioso, consecuencia de un líder capaz de tomar las decisiones más arriesgadas y más beneficiosas para su organización.
Desventajas
El ego puede ser el principal enemigo de un líder visionario, pues el éxito de sus decisiones puede subirse a la cabeza y crear escenarios donde sin él y sin su visión la organización no será exitosa.
Uno de los ejemplos más importantes de líderes visionarios es Elon Musk, CEO de grandes compañías como SpaceX o Tesla Inc. Musk se caracteriza por su constante innovación y ambición para desarrollar tecnologías cada vez mejores y más útiles.
Coaching
Este estilo de liderazgo se enfoca en el entrenamiento y capacitación de los grupos de trabajo. Este líder se caracteriza por su pedagogía y su habilidad para comunicar conocimientos, dar retroalimentación y consejos a los miembros del equipo con el fin de guiarlos hacia la consecución de los objetivos de la organización.
Ventajas
Su principal ventaja es la creación de un ambiente laboral positivo, donde cada empleado tiene las condiciones idóneas para progresar profesionalmente, contribuir y colaborar con la organización y expresar sus puntos de vista.
Desventajas
La principal barrera en este liderazgo es que el proceso de aprendizaje que lo caracteriza puede alargar los plazos en los que se deben cumplir los planes de trabajo, ya que la asimilación de nuevas instrucciones y tareas puede tomar su tiempo.
Talane Miedaner sirve de gran ejemplo en este estilo de liderazgo. Escribió el best-seller Coaching para el éxito, donde enseña a las personas a conseguir las oportunidades laborales deseadas.
Liderazgo transformacional
La innovación es la clave en este tipo de liderazgo. Los líderes transformacionales incentivan las nuevas ideas, los cambios y el abordaje de problemas, viejos o nuevos, desde distintas perspectivas y desde un entorno colaborativo. La razón de ser de este estilo es fomentar y motivar lo nuevo y lo diferente, que también es una forma de proyectar el éxito de la organización en el futuro.
Ventajas
Una de las mayores ventajas es su capacidad para que los empleados crezcan y adquieran nuevas habilidades profesionales, lo cual ocasiona un clima laboral de cambios positivos constantes.
Desventajas
Puede resultar en desventaja para aquellos trabajadores que no se desarrollan bien en equipos o grupos de trabajo y, por lo tanto, su rendimiento es mejor cuando trabajan solos.
Un gran líder transformacional fue Steve Jobs, padre fundador de Apple Inc. Gracias a su constante necesidad de innovación y compromiso con el crecimiento de su marca, él fue capaz de liderar y construir un equipo de trabajo que hoy día sigue siendo ejemplo mundial.
Liderazgo transaccional
Es uno de los tipos de liderazgo empresarial, y tiene en su esencia el clásico sistema de premiación y castigo. Aquí, el líder tiene como función principal asegurar el cumplimiento de tareas y obligaciones de parte de los empleados. Para garantizar que cada miembro del equipo de trabajo tenga un buen desempeño, se da una recompensa a aquellos que logran los objetivos y se deja sin beneficios al que no. Se da así una «transacción» de beneficio (del empleado) por beneficio (a la organización)
Ventajas
La puntualidad de las tareas asignadas y la motivación al trabajo vía compensaciones, como premios y cumplidos, son sus principales ventajas.
Desventajas
La desventaja más significativa es la falta de ambición y progreso, pues existe la tendencia de que algunos trabajadores solo cumplan con sus deberes para recibir un premio, sin tener como objetivo mejorar y crecer profesionalmente.
Quizás uno de los más conocidos ejemplos de liderazgos transaccionales sea Ray Kroc, el CEO de McDonald’s, creador de uno de los sistemas de recompensa más usados hoy día: el empleado del mes.
Liderazgo carismático
El líder de este estilo se caracteriza por su entusiasmo y optimismo, además de ser un comunicador efectivo y establecer relaciones interpersonales con relativa facilidad.
Debido a estas características, se crea a su alrededor un clima laboral donde prevalece la confianza, la empatía y la participación, donde el líder se erige como una figura que inspira seguridad, compromiso con los objetivos de la organización y sus valores.
Ventajas
Sus habilidades comunicativas suponen su mayor ventaja, ya que es capaz de atraer y convencer a los demás sobre una manera determinada de alcanzar metas.
Desventajas
Resulta un estilo de liderazgo desventajoso si se aplica a ambientes laborales que trabajen con plazos cortos y exijan metas de productividad altas. Asimismo, si se tienen grupos de trabajo amplios puede resultar complicado para un líder carismático convencer a cada miembro del equipo.
Michael Jordan, exestrella de la NBA, es un ejemplo de liderazgo carismático. A pesar de que era altamente competitivo, siempre procuraba que el trabajo en equipo estuviera primero, buscando mejorar las capacidades y habilidades de juego de sus compañeros de equipo.
Importancia del liderazgo
Los diferentes tipos de liderazgo cumplen un rol fundamental en la sociedad, pues permiten el logro de objetivos. Un buen líder, además, es garantía de que existirá un beneficio que no solo es para una organización, sino también para las personas que la conforman y trabajan en ella. En ese sentido, es importante recalcar los puntos que hacen que el liderazgo sea tan relevante hoy día:
- Los líderes trabajan con el capital más importante: el capital humano. Escuchan, inspiran, incluyen, motivan, guían a los miembros del grupo de trabajo. También son capaces de fomentar hábitos saludables fuera del trabajo, pues comprenden que una persona de mente y cuerpo sano es capaz de desarrollar mejor sus funciones.
- Generan acción y obtienen resultados. No solo pueden influenciar formas de pensar, sino también de actuar y en la ejecución de planes.
- Generan confianza a través de sus palabras y el cumplimiento de planes de trabajo.
- Evitan conflictos o promueven su resolución por medio de la comunicación efectiva con sus compañeros y/o empleados, y la capacidad para concretar acuerdos entre las partes.
- Muestran capacidad de resolución de problemas bajo diferentes condiciones y en diferentes entornos. Planifican estrategias y se preparan para diversas eventualidades que puedan poner en riesgo el plan original de trabajo.
- Son capaces de establecer una nueva dirección, o mantenerla, de modo que su organización tenga éxito tanto en el corto y largo plazo, y en diversos escenarios.
Al tener esto en cuenta debes comprender dos cosas: la primera es que todos podemos ser líderes. Si bien es cierto que existe el líder natural, con trabajo y dedicación puedes convertirte en uno, si no naciste con ese «talento».
La segunda es que, al desarrollarte como uno, vas a tener tu propio estilo para liderar. Lo importante es que sepas cuál tipo de liderazgo se amolda más a tu personalidad, y que, a partir de allí, nutras cada uno de los elementos que te pueden convertir en un buen líder.
Sabemos que este tipo de contenido es fundamental para el desarrollo de tus capacidades como profesional, por eso ¡no dudes en visitar los artículos que tenemos preparados para ti en nuestro portal de noticias y suscribirte a nuestro newsletter!
