Read in English
Estados Unidos podría estar a punto de quedarse sin espacio para incurrir en más endeudamiento federal durante este año, a menos que el Congreso decida suspender el límite establecido, ha dicho la secretaria del Tesoro, Janet Yellen.
En 2019 el Congreso suspendió temporalmente el techo de la deuda que podía asumir el Gobierno Federal, suspensión que duraría hasta el 31 de julio de 2021. En el presente, si no se suspende el límite federal para endeudamiento o se sube el techo, el Departamento del Tesoro no podrá seguir emitiendo bonos del gobierno para reunir dinero y seguir cubriendo los gastos de funcionamiento del Estado, por lo que tendrá que aplicar medidas de emergencia para responder por estas obligaciones, como hacer recortes en gasto público.
En su audiencia frente al Senado, Yellen insistió en que la pandemia ha hecho difícil cuantificar la dimensión de los pagos del gobierno, por lo que según la secretaria no es claro cuando podrá el Tesoro dejar de recurrir a este endeudamiento.
Si no hay aprobación del congreso de aumentar el limite de endeudamiento o eliminarlo temporalmente, podría ocasionar problemas de caja al Departamento del Tesoro, lo que generaría que el Gobierno Federal se quede corto para responder por sus obligaciones e incluso empiece a incurrir en default en el pago de su deuda.
“No aumentar el límite de la deuda tendría consecuencias económicas absolutamente catastróficas”, advirtió Yellen en medio de su audiencia con el Senado. La secretaria del Tesoro también advirtió sobre los riesgos de no ampliar el margen de endeudamiento pues “podría precipitar una crisis financiera. Pondría en riesgo trabajos y ahorros de los americanos en un tiempo en el que todavía estamos recuperándonos de la pandemia del Covid”.
Durante las negociaciones del plan de estímulo del presidente Joe Biden, el Partido Demócrata decidió no incluir un incremento en el techo de la deuda dentro del paquete, sin embargo dicho aumento podría considerarse en el nuevo plan de infraestructura que se está negociando entre la Casa Blanca y senadores de ambos partidos.
Para la Casa Blanca hay espacio para más endeudamiento federal
La capacidad de endeudamiento del Departamento del Tesoro también dependerá en buena medida de la velocidad que tenga el IRS (la Dirección de Impuestos) para recaudar impuestos, recolección que ha sido bastante volátil durante la pandemia, sin embargo, incrementó su recaudo un 26 % en lo corrido del 2021 por el rápido crecimiento económico. Los pronósticos para los próximos años estiman un incremento en el ingreso federal en el futuro, dándole un colchón de efectivo al Departamento del Tesoro.
En el presente la deuda federal de Estados Unidos supera el 100 % del PIB americano y se estima que superará el 107 % del PIB en 10 años. La administración Biden por su lado estima que el crecimiento de la economía americana durante los próximos años hará incluso el pago de la deuda negativo, lo que significará que el gobierno gozará de superávit por algún tiempo.
A pesar de las premoniciones de la Casa Blanca, el déficit escaló a $2,100 millones durante los primeros 8 meses del año fiscal, que va de octubre del año pasado a septiembre del 2021. Con la pandemia y tres planes de estímulo la economía americana vio la mayor expansión del gasto federal, no antes vista desde la Segunda Guerra Mundial.
El creciente déficit continuará siendo un punto de debate en el Congreso y una piedra en el zapato para la administración Biden que busca negociar otros dos mega planes, el Plan de Trabajos Americanos y el Plan de Familias Americanas.
Economist, writer and liberal. With a focus on finance, the war on drugs, history, and geopolitics // Economista, escritor y liberal. Con enfoque en finanzas, guerra contra las drogas, historia y geopolítica