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Un juez de Florida dictaminó que el gobernador Ron DeSantis no tendrá que comparecer personalmente en el caso presentado por un fiscal al que despidió por no hacer cumplir la legislación relacionada con el aborto y al que el mismo DeSantis calificó como una ficha de George Soros.
El fiscal Andrew Warren fue suspendido por DeSantis en agosto después de que declarara que no haría cumplir la prohibición de aborto de 15 semanas del Estado de Florida (aquí el reporte).
Warren luego demandó al gobernador y al estado alegando que se violaron sus derechos de libertad de expresión.
Los documentos presentados antes del próximo juicio supuestamente demostraban que la administración del gobernador planeó de mala fe la cobertura de los medios sobre la suspensión.
Un memorando elaborado por un exempleado legal de la administración de DeSantis describió algunos de los “beneficios” e “inconvenientes” frente a la opinión pública que generarían una serie de decisiones, como suspender a Warren o dejarlo permanecer en el cargo.
El memorando también sugirió que el “perfil” del fiscal podría aumentar si hubiera una pelea política por la suspensión, mencionando frases como: “Fiscal de izquierda es removido de una posición de poder”.
En septiembre, el juez federal de distrito Robert L. Hinkle se negó a reincorporar a Andrew Warren mientras continúa el proceso de su demanda contra el gobernador de Florida, según informó The Associated Press.
La demanda pide que se reintegre a Warren y que se prohíba al gobernador DeSantis tomar medidas similares contra él en el futuro.
En una de las declaraciones en torno al proceso, el fiscal declaró: “Esperamos un juicio en el que el gobernador pueda entrar y explicarle al tribunal por qué cree que lo que hizo cumple con las leyes federales y estatales”. Por otra parte, el abogado defensor del fiscal declaró: “El juez está claramente y con razón tan interesado en lo que diría el gobernador en un foro judicial y el juicio sería esa oportunidad”.
Un tema pendiente antes del juicio era si DeSantis o James Uthmeier, el jefe de gabinete del gobernador, tendrían que comparecer. Los abogados de Warren sostuvieron que es posible que deban llamar al gobernador para que explique completamente por qué tomó la decisión de suspender a Warren. Los abogados que representan a DeSantis respondieron que su testimonio no es necesario y que hay muchas pruebas disponibles para explicar las motivaciones del gobernador.
Durante una conferencia previa al juicio, realizada por teléfono, Hinkle acordó proteger a DeSantis de testificar en el caso.
El equipo legal de Warren indicó que había la posibilidad de volver a solicitar llamar al gobernador para que testifique según los argumentos de la defensa presentados por el equipo legal de la fiscal general de Florida, Ashley Moody. Pero el juez Hinkle agregó que “creo que es muy poco probable que la situación cambie”.
El equipo legal de DeSantis también declaró: “El gobernador interpretó razonablemente las declaraciones del Sr. Warren como negativas generales a hacer cumplir la ley de Florida o como evidencia de que el Sr. Warren ignoraba enormemente sus responsabilidades oficiales”.
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