El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se despedirá de la Casa Blanca con lo que podría ser calificado uno de los mayores logros en la historia del país y del mundo: la Operación Warp Speed (OWS); el programa que impulsó la creación de la vacuna contra el Covid-19.
Gracias al Gobierno de Trump y a la Operación Warp Speed, gran parte de la población mundial podrá ser inmunizada contra el virus que ha acabado con la vida de 1,7 millones de personas. Se trata de la iniciativa de salud más grande en la historia de los Estados Unidos que permitió obtener la inyección en tan solo 10 meses de pandemia.
Trump bautizó la operación “Warp Speed”, en referencia a un término de ciencia ficción que implica ir más rápido que la velocidad de la luz. Para ello nombró a un general del ejército y a un exdirectivo de los laboratorios GSK para combinar la experiencia de los científicos del Departamento de Salud con la logística militar.
El Gobierno americano invirtió más de $ 10.000 millones dentro de este programa para obtener antes de finales de enero del 2021, 300 millones de dosis de la vacuna, algo nunca antes conseguido en la historia.
Normalmente, el desarrollo de una vacuna requiere de décadas de investigaciones y pruebas para dar con una solución segura y eficiente, algo que gracias a la administración Trump y a los científicos que participaron, parece haberse conseguido en solo diez meses sin comprometer la seguridad.
“La administración de Trump merece algo de crédito por haber hecho despegar esto, Operación Warp Speed”, dijo el demócrata Joe Biden luego de aplicarse la vacuna y tras reconocer el innegable esfuerzo de la Casa Blanca para acelerar el desarrollo de vacunas.
La Operación Warp Speed anunciada oficialmente el 15 de mayo es una asociación público-privada iniciada por el gobierno de Trump para facilitar, acelerar el desarrollo, la fabricación y la distribución de vacunas, terapias y diagnósticos contra la Covid-19.
Warp Speed fue financiada inicialmente con alrededor de $10 millones de la Let CARES (Ayuda, Alivio y Seguridad Económica por Coronavirus) aprobada por el Congreso de los Estados Unidos el 27 de marzo.
Puede considerarse que los esfuerzos de Trump por impulsar la creación de la vacuna serán un regalo de navidad para Biden cuando llegue a la Casa Blanca, quien tendrá poco tiempo para lidiar con las críticas de cómo atacar la enfermedad. Ya la solución existe y se está distribuyendo por todo el país gracias a la actual administración.
Trump no solo impulsó la operación Warp Speed sino que además ha buscado asegurarse que los ciudadanos americanos sean los primeros en recibir la vacuna. El 8 de diciembre el mandatario firmó una orden ejecutiva para que los americanos tengan acceso a las vacunas antes que otros países.
Tanto Pfizer como Moderna recibieron dinero del Gobierno, pero solo Moderna lo utilizó para sufragar la primera parte del desarrollo. Ambas farmacéuticas ya están entregando las vacunas a los países con los que hicieron acuerdos.
Las primeras 100 millones de dosis de Pfizer y su socia la alemana BioNTech, fueron para Estados Unidos, según un acuerdo que forma parte de la Operación Warp Speed por el que Washington se comprometió a pagar US$ 1,950 millones a Pfizer, con la opción de ampliar a 500 millones de vacunas.
Warp Speed: la mayor campaña de vacunación en la historia
Es el comienzo de la mayor campaña de vacunación de la historia de Estados Unidos y del mundo, pues cinco países ya están administrando la vacuna de Pfizer para combatir la pandemia.
Las inyecciones de Pfizer y Moderna requieren dos dosis, administradas con 21 y 28 días de diferencia, respectivamente. Operation Warp Speed quiere asegurarse de que siempre haya una vacuna disponible para la segunda dosis.
De acuerdo con Paul Ostrowski, quien dirige la producción y la distribución de la Operación, el programa de vacunación consiste en enviar solo la mitad de todas las vacunas disponibles cada semana. La otra mitad se mantendrá almacenada y se entregará justo antes de la fecha límite para la segunda dosis de los vacunados por primera vez.
La Unión Europea por su parte, encargó dosis a seis fabricantes, entre ellos cinco que son apoyados por “Warp Speed”.
“La potencia de la inversión tuvo un importante efecto acelerador”, dijo a la agencia de noticias AFP en París Loïc Chabanier, de la consultora EY quien señaló que el apoyo de Estados Unidos permitió financiar ensayos clínicos a gran escala, además de la renovación de edificios o la construcción de fábricas.
“Los americanos financiaron el estudio clínico para el planeta entero”, sentenció el consejero delegado de Moderna, Stéphane Bancel.
Sabrina Martín Rondon is a Venezuelan journalist. Her source is politics and economics. She is a specialist in corporate communications and is committed to the task of dismantling the supposed benefits of socialism // Sabrina Martín Rondon es periodista venezolana. Su fuente es la política y economía. Es especialista en comunicaciones corporativas y se ha comprometido con la tarea de desmontar las supuestas bondades del socialismo