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El nuevo aeropuerto de AMLO: una solución imaginaria a un problema real

Nuevo aeropuerto AMLO, El American

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López Obrador (AMLO) inauguró finalmente el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA). No sabemos el costo total de esta obra, pero el gobierno ha dicho que la cifra es de alrededor de 79 mil millones de pesos, 3.96 mil millones de dólares. A esto debe sumarse entre 13.5 y 16.6 mil millones de dólares que está costando cancelar el proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAICM).

He visto comentarios en las redes de que con el dinero que costó la cancelación se hubieran pagado otros 5 aeropuertos. Esto es matemáticamente cierto, pero ignora el hecho de que ese dinero se debía a acreedores, no estaba disponible para construir nada. Dicho en términos económicos: el costo de oportunidad de construir el AIFA era el precio por cancelar el NAICM.

Aún más simplificado, podríamos decir que López Obrador decidió pagar 20 mil millones de dólares por un aeropuerto de 3.96 millones de dólares.

La discusión sobre el dinero es complicada, no sabemos exactamente cuánto costó ninguno de los dos aeropuertos, lo único que conocemos a ciencia cierta es que el NAICM no se construyó, pero se pagó de todas maneras.

Dada esta situación, la crítica al nuevo aeropuerto se ha centrado en su lejanía a la ciudad, en la falta de transporte desde la ciudad hasta allá y, finalmente, en la terrible arquitectura y la decoración que para muchos es hasta de mal gusto.

Es horrible y está muy lejos, de eso no hay duda. Pero lo que queda por responder es si el aeropuerto cumplirá con su función de reducir la saturación del Aeropuerto Internacional Benito Juárez (AICM). 

El AICM tiene una capacidad de 30 millones de pasajeros, aunque antes de la pandemia llegó a recibir 50.3 millones. Por su parte, el NAICM en su primera fase podría atender a 69.6 millones, cifra que escalaría hasta 137 millones cuando alcanzara su última fase.

AIFA, de acuerdo al plan presentado, tiene una capacidad de 20 millones en su primera fase y supuestamente podrá atender 80 millones de pasajeros al año. Es con estas cifras que el gobierno mexicano nos dice que 80 + 50 son 130 y que, por lo tanto, es la misma capacidad del NAICM a mucho menor precio. 

Lo del precio está desmentido ya por completo, el NAICM se pagó de todos modos, pero el asunto de la capacidad no es como lo pintan. El AICM tiene un problema severo de saturación, los 50.3 millones que llegó a atender rebasan por completo al aeropuerto, ese problema se iba a solucionar con la capacidad del NAICM, pero solo se resuelve parcialmente si sumamos la verdadera capacidad del actual aeropuerto con la de Santa Lucía… 30 + 20 = 50… El problema es menor, pero sigue siendo un problema, y además pagamos 16.6 mil millones de dólares más.

El Aeropuerto Internacional de Toluca (AIT) podría ser la clave para que la contabilidad cuadrara, ya que tiene capacidad para 10 millones de pasajeros. Sin embargo, tener capacidad no necesariamente quiere decir que tengas pasajeros, el AIT abrió en 2006 y en 2008 llegó a atender a casi 4 millones de viajeros. A partir de ahí, sus usuarios se fueron en picada atendiendo alrededor de medio millón de pasajeros en el año anterior a la pandemia. ¿Por qué?, porque tras el cierre de Mexicana de Aviación las aerolíneas que volaban en Toluca decidieron trasladarse al AICM, finalmente su clientela estaba en la Ciudad de México.

Ahí es donde aparece otro detalle clave, las aerolíneas no querían volar desde Toluca y ahora no quieren volar desde Pachuca, la ciudad más cercana al AIFA, no solo por la lejanía sino porque no está certificado para ser un aeropuerto internacional. El gobierno mexicano ha anunciado planes para restringir el 30 % de actividad en ese aeropuerto para “incentivar” a las líneas a moverse a su nuevo elefante blanco. Volvemos a los cálculos. 30×30 %= 21… 21+20= 40… Ahora nos faltan 11 para completar los casi 51 que se necesitan… hay 10 teóricos en Toluca, pero no líneas dispuestas a moverse allá.

Para mostrar al mundo que el AIFA es un aeropuerto internacional, el gobierno anunció con fanfarrias que el primer vuelo hacia fuera del país sería a Caracas y que lo operaría CONVIASA, la línea del régimen venezolano que, por cierto, también cuenta con rutas a Bolivia, Cuba, Nicaragua y Rusia. 

Este último detalle y los cálculos de capacidad me hacen pensar que tal vez AMLO está pensando en el largo plazo al que lleva un régimen como el suyo, donde la mayoría no tiene dinero para volar y los que pueden solo tienen permiso de ir a visitar otras dictaduras. Espero que no sea eso, y que solamente sea muy malo haciendo sumas.

José Torra is an economist, Research Coordinator at Caminos de la Libertad, co-author of the Fraser Institute's Economic Freedom of North America Index, and co-host of the podcast Libertad Aquí y Ahora // José Torra es economista, Coordinador de investigación en Caminos de la Libertad, coautor del índice Economic Freedom of Northamerica del Fraser Institute, y co-conductor del podcast Libertad Aquí y Ahora

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