Read in English
APENAS SE CONOCIÓ el triunfo en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Colombia del izquierdista y exguerrillero Gustavo Petro, partidos políticos tradicionales, que se habían opuesto a la candidatura de Petro, anunciaron su adhesión al nuevo Gobierno.
Ni los tradicionales Partido Liberal y Partido Conservador apoyaron a Gustavo Petro durante la campaña por las elecciones, pero luego de su triunfo informaron a los colombianos que no serían oposición.
El único partido que, por ahora, se mantiene como oposición al nuevo Gobierno de izquierda en Colombia es el Centro Democrático, el partido político de centro-derecha que fue fundado por el expresidente Álvaro Uribe y al que pertenece el expresidente Iván Duque, quien dejó el cargo hace menos de una semana.
Aunque no es mayoría en el Congreso, el Centro Democrático goza de fuerza, pues, al ser el único partido de oposición, interpreta a los más de diez millones de colombianos que votaron en contra de Gustavo Petro en las elecciones el pasado 19 de junio. Y es una oposición que cuenta con una representación fuerte, que está decidida a resistir los próximos años de un Gobierno que tiene un control casi absoluto sobre las instituciones. Lo más llamativo de esta oposición es que las tres principales figuras son mujeres. Paloma Valencia, Paola Holguín y María Fernanda Cabal, las tres senadoras, son los fenómenos políticos más sobresalientes del Centro Democrático y se perfilan como las líderes de la oposición a Petro.
De hecho, Valencia, Holguín y Cabal fueron las elegidas por el partido para representar a la oposición dentro Congreso con las palabras de respuesta al discurso de toma de posesión de Petro, el pasado 7 de agosto.
Las tres senadoras han sobresalido por su firmeza y su discurso duro, provocador y combativo frente a los adversarios. El hecho de que las tres se hayan consolidado como las senadoras más destacadas del único partido de oposición habla muy bien de la sociedad colombiana, que vio el inmenso valor en la determinación y los principios de tres mujeres para hacerle frente a las políticas que buscará imponer el Gobierno extremista de Gustavo Petro.
Notables, sin duda, estas son Paloma Valencia, Paola Holguín y María Fernanda Cabal:
Paloma Valencia
Senadora desde el 2014, Paloma Valencia es heredera de una familia política de larga tradición e influencia en Colombia. Es abogada de la Universidad de los Andes y tiene una maestría en Escritura Creativa en la Universidad de Nueva York. Asumió su curul en el Senado en el 2014, cuando ganó con el apoyo del recién fundado partido Centro Democrático.
Valencia ha destacado dentro del Senado por sus posturas firmes en contra de la impunidad y por su defensa de las víctimas de los grupos guerrilleros y criminales de Colombia, como las FARC o el ELN. Por esa postura implacable, para Valencia es imposible coquetear con la idea de brindarle privilegios o indultos a criminales en Colombia a cambio de que se sometan a un proceso de negociación.
Por la firmeza en cuanto a sus ideas, Paloma se convirtió en una de las grandes críticas del Gobierno del expresidente Juan Manuel Santos, quien llevó a cabo, en contra de la voluntad popular, los acuerdos de paz con las FARC.
Paloma Valencia se ha consolidado como una de las mayores aliadas y defensoras del legado del expresidente Álvaro Uribe. Su cercanía al expresidente la consagra como una de las herederas predilectas de sus políticas, ideas y principios.
Paola Holguín
Antioquia es uno de los departamentos más importantes de Colombia, pues en Medellín, su capital, se concentra el músculo empresarial del país. Además, Antioquia siempre ha tenido una influencia decisiva en la política nacional y, gracias al apego de sus habitantes a la ética del trabajo y la generación de riqueza, jugó un papel decisivo en impedir que Colombia caiga en manos de la izquierda —hasta este año, cuando el resto del país se impuso.
No solo lo mencionado anteriormente le da relevancia a Paola Holguín. Nacida en Medellín, Holguín se ha convertido en una de las figuras políticas con más potencial del departamento de Antioquia. Sin embargo, lo que la catapulta como líder en el país es, también, su ímpetu e imparable energía.
Periodista de carrera, Paola Holguín se convirtió en una experta en seguridad y defensa, lo que la llevó a asesorar a Álvaro Uribe cuando era presidente. Luego, en el 2014, el Centro Democrático la apadrinó como candidata al Senado y, desde que triunfó ha sido una de las voces más importantes y dinámicas del Congreso colombiano.
Paola Holguín es indoblegable y esto queda retratado en cómo se expresa. Siempre dominada por una pasión impávida, habla y enfrenta a sus adversarios con una honestidad que la convierte en un fenómeno político.
Holguín se ha destacado como crítica de los acercamientos a las FARC y ha acusado al expresidente Juan Manuel Santos de entregarle el país a los criminales, al negociar curules gratis en el Senado a cambio de la supuesta pacificación de los grupos guerrilleros.
Su firmeza ha llevado a Holguín a asumir el liderazgo contra el alcalde de Medellín, acusado de corrupción y cercano a Gustavo Petro, y aa declarar su compromiso de resistir a la agenda socialista de Petro.
María Fernanda Cabal
Quizá la más polémica de las tres, cuando entrevistamos a María Fernanda Cabal nos dijo que el futuro que les espera a los opositores en Colombia es oscuro. Sin embargo, aseguró que está dispuesta a asumir todas las consecuencias de lo que implique.
Es empresaria. Se graduó de estudios políticos de la Universidad de los Andes y estudió historia y literatura en España. En 2006 asumió el cargo de directora de Asuntos Internacionales de la Fiscalía de Colombia y, en el 2014, arrancó su carrera política al convertirse en representante en la Cámara. Luego, en el 2018 fue elegida al Senado y este año, en el 2022, fue reelecta con la votación más alta para una mujer.
Cabal es controvertida porque es indomable y no se somete a la línea del partido, lo que le da un valor y una independencia tremenda. Por su postura autónoma, que la ha llevado a ser una de las críticas más destacadas del propio Gobierno de Iván Duque —que también es del Centro Democrático—, se ha consolidado como un fenómeno político absoluto.
Es una polemista refinada, y apela astutamente a ello. Conocida por sus declaraciones políticamente incorrectas, se ha consagrado como la principal representante de la derecha colombiana.
María Fernanda Cabal, conservadora, ha llegado incluso a decir que algunas de las ideas económicas y sociales de su partido están a la izquierda de ella. Por su naturaleza indómita muchos especulan sobre la posibilidad de que Cabal se aparte del Centro Democrático, pero ella ha insistido en la importancia de seguir construyendo el partido.
Por perfilarse como la principal figura de la verdadera derecha colombiana, Cabal ha ganado terreno y acumulado capital político. Ello la consolida como una de las tres principales líderes de la oposición, que tendrán un reto gigante los próximos años.
Hoy Gustavo Petro tiene la mayoría en el Congreso, gracias al apoyo de los partidos tradicionales, y es probable que logre el control pleno sobre el resto de las instituciones. Ello aumenta el desafío que enfrentarían Valencia, Holguín y Cabal, pero también aumenta su responsabilidad, al ser las principales figuras de la resistencia que deberá impedir el inminente desarrollo autoritario del Gobierno de Petro.
Orlando Avendaño is the co-editor-in-chief of El American. He is a Venezuelan journalist and has studies in the History of Venezuela. He is the author of the book Days of submission // Orlando Avendaño es el co-editor en Jefe de El American. Es periodista venezolano y cuenta con estudios en Historia de Venezuela. Es autor del libro Días de sumisión.