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En CPAC se confirma: el GOP sigue siendo de Trump

CPAC, Trump, El American

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Si es que viene una “guerra civil” en el GOP, esta no se nota en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC por sus siglas en inglés). Donald Trump sigue siendo el líder político más importante el Partido Republicano y el movimiento conservador de los Estados Unidos, derrotando en forma contundente a quienes apostaban a un colapso de ese liderazgo tras la toma del Capitolio y la subsecuente andanada de ataques mediáticos en su contra, además de la toma de protesta de Biden el segundo proceso de impeachment.

CPAC es territorio Trump

El 25 de febrero comenzó la más reciente edición de la Conferencia de la Acción Política Conservadora (CPAC), el evento más importante dentro del ecosistema político de la derecha americana, que tradicionalmente se lleva a cabo en la ciudad de Washington, pero este año se trasladó a Orlando, quizá en parte para evitar las restricciones derivadas de la pandemia de Covid-19, y para enviar la señal del popular gobernador de Florida, Ron DeSantis, como el próximo gran referente del Partido Republicano

DeSantis fue el primer orador en la jornada del 26 de febrero, con un discurso sólido, interesante y bien recibido por la multitud por los asistentes, aunque el más exitoso de la primera mañana fue Ted Cruz, y el momento más popular de su discurso fue cuando hizo referencia al liderazgo y la perseverancia del presidente Trump. Donald va a participar hasta el domingo, pero su presencia ya domina el ambiente, reforzada por la presencia de Donald Trump Jr. como uno de los oradores estelares del viernes 26.

Recorrer CPAC es encontrar en todos lados el nombre y esperanza de Trump, lo mismo en los cubrebocas con la leyenda “Make America Great Again”, que en los broches, las banderas, la mercancía que está a la venta y los adornos que portan cientos de los asistentes, está presente. Ningún otro político tiene una presencia comparable. De hecho, pareciera que los demás liderazgos han entendido esta realidad y optan por apalancar sus propios perfiles en el respeto y la popularidad que genera Trump.

El resto de CPAC, durante este fin de semana, confirmará o desmentirá mi percepción inicial, pero hasta ahora me parece que Donald Trump es, con diferencia, el candidato líder de cara al 2024 y que, al menos en el escenario actual, la verdadera contienda interna tendrá que centrarse en cuál será la figura que lo acompañaría como candidato a vicepresidente.

CPAC, Trump, El American
Trump es la estrella indiscutible en CPAC. La duda es quién sería su vicepresidente. (Imagen: El American/G. Garibay)

Trump sigue fuerte, incluso fuera de la Casa Blanca

Algo es indiscutible: En CPAC se desmorona el castillo de arena que habían construido los voceros e intelectuales de la tecnocracia respecto a que la derrota electoral del 2020 significaría el fin del mito de Trump y de su liderazgo. Por el contrario, dicha derrota, envuelta en la narrativa del fraude y de la injusticia cometida en su contra, le añade una pátina de cercanía que, incluso, fortalece su atractivo a los ojos de buena parte del movimiento.

Para millones en América, incluyendo al menos a la mitad de los asistentes a CPAC, Trump es referente, no solo por su dinero o por sus cargos, sino porque representa sus voces, encarna sus esperanzas (y ahora también sus derrotas y su perseverancia) con una autenticidad difícil de encontrar en otros políticos.

Para acabar pronto, Trump no solo es una figura aspiracional, sino también una inspiración auténtica, con quien los activistas conservadores han desarrollado una vinculación personal y emocional, del tipo de cercanías que no se abandona en el corto plazo, así que el domingo 28, cuando suba al estrado de CPAC, no lo hará como un general en derrota, sino como un conquistar en ciernes, que prepara la siguiente campaña de conquista.

Hay rumores de que Donald usará su mensaje para exhibir a los traidores a su movimiento dentro de los liderazgos del Partido Republicano, y de ser así, esos “líderes” deben estar “muuuy” preocupados por su futuro político, por lo siguiente: Trump encabeza el alma del Partido Republicano, mucho más que cualquier directivo de los comités. Por eso no necesita un tercer partido, el GOP sigue siendo el partido de Donald J. Trump, para la resignada desesperación de varios, y para la alegría de muchos más.

Gerardo Garibay Camarena, is a doctor of law, writer and political analyst with experience in the public and private sectors. His new book is "How to Play Chess Without Craps: A Guide to Reading Politics and Understanding Politicians" // Gerardo Garibay Camarena es doctor en derecho, escritor y analista político con experiencia en el sector público y privado. Su nuevo libro es “Cómo jugar al ajedrez Sin dados: Una guía para leer la política y entender a los políticos”

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