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EL PRESIDENTE TURCO, Recep Tayyip Erdoğan, dijo el miércoles que no cree que las políticas “provocadoras” de Occidente hacia Rusia sean el enfoque correcto, después de que la Unión Europea propusiera un tope al precio del petróleo y el gas rusos.
Erdoğan habló tras una reunión en Belgrado con su homólogo serbio Aleksandar Vučić.
“No quiero mencionar nombres, pero hay algunos países en Occidente que, consideramos, no tienen un enfoque correcto y que se basa en instigaciones, y esas políticas provocadoras no pueden lograr resultados”, dijo Erdoğan.
El líder turco dijo que su país continuará con su política de equilibrio entre Rusia y Ucrania, que están envueltos en un conflicto en el que “no puede haber un ganador, pero hay un gran número de perdedores.”
Erdoğan desestimó las afirmaciones de las potencias occidentales sobre la cantidad de ayuda financiera que han destinado a Ucrania como “meras palabras”, al tiempo que restó importancia al apoyo militar que Ucrania ha recibido de Occidente. “Les han enviado toda la chatarra que tienen”, dijo.
“Hasta ahora hemos mantenido nuestra política, hemos intentado analizar los diferentes enfoques y entender si esta guerra puede terminar pronto, pero no parece que vaya a terminar pronto”, dijo el presidente turco, que instó a la comunidad internacional a “no subestimar a Rusia”.
“Rusia ha dejado de suministrar gas natural y los precios han subido, y ahora todo el mundo está tratando de encontrar una manera de sobrevivir al invierno”, dijo.
Sin embargo, Erdoğan sugirió que espera que se encuentre una solución para que la guerra termine y el mundo pueda vivir en paz.
El presidente turco se reunió en Belgrado con Vučić para hablar de las relaciones bilaterales y de la situación geopolítica regional.
Serbia es la segunda parada de su gira por los Balcanes, que comenzó el martes en Bosnia y Herzegovina y concluirá el jueves en Croacia.
