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EL ÚLTIMO líder de la extinta Unión Soviética (URSS), Mijaíl Gorbachov, murió a sus 91 años en el Hospital Clínico Central de Moscú este martes.
Según la agencia Interfax, Gorbachov murió tras una “larga enfermedad”.
На 92-году скончался последний президент СССР Михаил Горбачевhttps://t.co/MFiaa4dmSV
— Интерфакс-Украина (@interfaxua) August 30, 2022
“Mikhail Sergeevich Gorbachov murió esta madrugada tras una larga y seria enfermedad”, dijo el Hospital Clínico Central de Moscú, citado por Interfax.
El portavoz de Vladimir Putin, Dmitry Peskov, dijo a Interfax que el mandatario ruso expresó “sus más profundas condolencias” sobre el fallecimiento del líder soviético.
Por su parte, la agencia estatal rusa de noticias, TASS, informó que el exgobernante será enterrado en el cementerio de Novodevichy de Moscú, junto a los restos de su esposa y distintas figuras históricas de ese país.
El fin de la Guerra Fría
El mayor legado de Gorbachov es probablemente su liderazgo al acordar, cuando recién asumía la Secretaría General del Partido Comunista soviético, la disolución de la URSS en un histórico acuerdo con el expresidente americano Ronald Reagan, en lo que se conoció como la Cumbre de Ginebra.
En 1985, cuando el “Imperio del Mal” comunista era amenazado por la artillería misilística de Estados Unidos, Gorbachov y Reagan dieron un giro definitivo a las relaciones internacionales, no sólo entre los dos países (que en aquél entonces eran las dos grandes potencias), sino entre Rusia y el mundo libre. Ambos líderes decidieron entonces que una guerra nuclear significaría, no el fin de la guerra, sino el fin de la humanidad.
El líder ruso no enfrentaba un escenario sencillo. No sólo hacía frente a los enemigos de una debilitada Unión Soviética, también proponía un drástico giro a la democracia a su propia población que incluía reformas económicas, distantes del sistema comunista.
Aún así, Gorbachov alcanzó acuerdos nucleares con Estados Unidos y acercó a la URSS a Occidente por primera vez en décadas. Por ese mismo motivo, sus enemigos internos le propiciaron un intento (fallido) de golpe de Estado en 1991.
Ese mismo año, el presidente Boris Yeltsin decidió la desintegración de la URSS, y con ello, daba una estocada final al liderazgo de Gorbachov. Su legado, sin embargo, permitió años de una paz frágil pero decidida entre Rusia y Occidente.
Tomás Lugo, journalist and writer. Born in Venezuela and graduated in Social Communication. Has written for international media outlets. Currently living in Colombia // Tomás Lugo, periodista y articulista. Nacido en Venezuela y graduado en Comunicación Social. Ha escrito para medios internacionales. Actualmente reside en Colombia.