Luego que Emad al-Baz, jefe de la Autoridad de Tierras del gobierno controlado por Hamás en Gaza, acusó a los habitantes de la aldea de Umm al-Nasr al norte de la Franja de Gaza de ocupar y construir ilegalmente en “tierras del Estado” cientos de pistoleros armados de Hamás asaltaron el 9 de junio Umm al-Nasr, demoliendo al menos una casa, en un fallido intento de desalojar completamente esa aldea árabe fundada hace casi 80 años.
Los aldeanos resistieron el desalojo apedreando a los agentes de Hamás, que respondieron golpeando brutalmente a los residentes y disparándoles. En el violento enfrentamiento un oficial de Hamás habría resultado herido, mientras las fuerzas de Hamás arrestaban a 85 aldeanos y herían a 25. Entre los 25 aldeanos heridos, 8 sufrieron heridas de bala.
Un aldeano de Umm al-Nasr, Yahya Abu Thariyeh, relató al Independent Arabia que los efectivos de Hamás allanaron las casas sin orden judicial y amenazando agresivamente a mujeres y niños lograron demoler al menos una casa antes que los aldeanos empezaran a resistirse. También explicó Abu Thariyeh que los hombres de Hamás llegaron junto con una ambulancia a la que impidieron transportar a los aldeanos heridos, y que también impidieron a otras ambulancias solicitadas por los aldeanos entrar a la aldea tras el enfrentamiento, por lo que los aldeanos heridos debieron ser precariamente transportados a centros de atención médica en vehículos particulares.
Según Mahmoud al-Zaq, secretario general de la Comisión Nacional de Trabajo en la Franja de Gaza, lo que ocurrió Umm al-Nasr fue parte de la política de Hamás de controlar violentamente todas las tierras públicas de la Franja de Gaza. Y Hamás ciertamente adelanta una brutal política de arrasar aldeas enteras en la Franja de Gaza, algo que podría explicarse como parte de sus esfuerzos para controlar a los dos millones de palestinos de la Franja mediante el terror, pero también como políticas de desplazamientos forzosos de potenciales desafectos a Hamás para copar el territorio con sus seguros partidarios. No olvidemos que con la corrupción generalizada de Hamás sus líderes fácilmente podrían apoderarse personalmente de las tierras más valiosas por medio de los desplazamientos forzosos.
La Comisión Independiente de Derechos Humanos palestina –ICHR– declaró que vio con gran preocupación los eventos de Umm al-Nasr y exigió la inmediata liberación de todos los aldeanos arrestados, además de una investigación a las fuerzas de seguridad de Hamás. Y pese al doble discurso del corrupto Gobierno de Fatah respecto a Hamás, el alto funcionario de Fatah, Hussein Hamayel, no podía dejar de denunciar la incursión de Hamás en Umm al-Nasr, ni de señalar que los líderes de Hamás están apoderándose violentamente de tierras árabes en la Franja de Gaza para dividirlas entre ellos y sus partidarios.
El escritor egipcio Ali Rajab señaló acertadamente la hipocresía de Hamás, una organización terrorista que se proclama defensora de los árabes beduinos de Israel en los conflictos por la tierra, mientras ataca y desplaza forzosamente a los beduinos que viven bajo su control en la Franja de Gaza, demoliendo sus hogares y confiscando sus tierras. Agregaré que esa hipocresía de Hamás la comparte el grueso de la prensa, intelectualidad y organizaciones defensoras de derechos humanos de izquierda de Occidente, así que si usted se ha enterado de la tragedia de Umm al-Nasr y de la política de desplazamientos forzosos de palestinos por Hamás en Gaza, es porque lee medios conservadores e independientes como El American.
La demolición de la casa de un terrorista arrestado, juzgado y condenado por asesinatos de civiles inocentes en Israel recibirá mucha y muy sesgada atención de la gran prensa izquierdista de Occidente, porque pueden calificarla falsamente de “crimen” de Israel. Pero la demolición de la casa de un aldeano inocente, en un asalto armado de los brutales pistoleros del gobierno terrorista de Hamás a una aldea de Gaza, como parte de la política de desplazamientos forzosos de árabes palestinos por el gobierno del grupo terrorista Hamás en la Franja de Gaza, para esa prensa “no es noticia” porque no le sirve a esa izquierda antisemita de excusa para atacar a Israel.
Guillermo Rodríguez is a professor of Political Economy in the extension area of the Faculty of Economic and Administrative Sciences at Universidad Monteávila, in Caracas. A researcher at the Juan de Mariana Center and author of several books // Guillermo es profesor de Economía Política en el área de extensión de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Monteávila, en Caracas, investigador en el Centro Juan de Mariana y autor de varios libros